El Vaticano ha dado un paso clave en su proceso de modernización tecnológica con el lanzamiento de la primera versión digital del Anuario Pontificio, una plataforma en línea que reunirá datos oficiales y actualizados sobre la estructura y autoridades de la Iglesia Católica en todo el mundo.
El anuario, que desde el siglo XIX se ha publicado en formato impreso, ahora estará disponible de forma digital con acceso más rápido y herramientas avanzadas de búsqueda por nombre, cargo, país o diócesis. Según la Santa Sede, esta nueva plataforma tiene como objetivo facilitar el acceso a información verificada para quienes desempeñan roles eclesiales.
Durante una audiencia privada celebrada el lunes, el papa León XIV accedió por primera vez al sistema y elogió el trabajo de los desarrolladores. “Les agradezco este trabajo, que será de gran utilidad para tantos que operan al servicio de la Iglesia. Les animo a proseguir con este espíritu de servicio, para que lo que nace con cuidado y atención se convierta con el tiempo en una ayuda aún mayor”, expresó el pontífice.
La iniciativa digital refuerza la línea del papa León XIV, quien ha defendido el uso de nuevas tecnologías de forma ética y responsable. En una reciente reunión con la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), el pontífice subrayó la necesidad de enseñar a los fieles a interactuar en el mundo digital de manera “humana”, para que internet sea un espacio de libertad y fraternidad.
La plataforma será de uso restringido mediante suscripción, con una tarifa de €18.90 trimestral o €68.10 anual, lo que equivale aproximadamente a $20.30 trimestrales o $73.00 anuales. El registro estará disponible para diócesis, dicasterios, congregaciones religiosas, representaciones pontificias y otras autoridades eclesiásticas.
A pesar de este avance, el Vaticano confirmó que mantendrá la versión impresa del Anuario Pontificio por su valor documental e histórico.
El sustituto para los Asuntos Generales, Edgar Peña Parra, señaló que esta digitalización “representa un paso significativo en el camino de renovación de los instrumentos de servicio de la Santa Sede”, al tiempo que permite “poner la tecnología al servicio de la misión eclesial”.
El desarrollo de la plataforma fue coordinado por la Secretaría de Estado junto al Dicasterio para la Comunicación, que diseñó la infraestructura tecnológica y la base de datos. Entre las próximas funciones previstas se encuentran la inclusión de más idiomas y la digitalización de archivos históricos.
