El Real Madrid cerró el 2025 con una victoria sin brillo ante el Sevilla FC (2-0), en el Estadio Santiago Bernabéu, en un partido flojo donde Kylian Mbappé igualó el récord de goles en un año natural de Cristiano Ronaldo y Thibaut Courtois volvió a ser determinante.
El conjunto dirigido por Xabi Alonso no logró despejar las dudas sobre su estilo de juego, pero sumó tres puntos importantes que lo colocan a un punto del FC Barcelona, a la espera de su duelo ante el Villarreal CF. Un cabezazo de Jude Bellingham y un penalti ejecutado por Mbappé bastaron para sellar el triunfo.
La anotación del delantero francés, quien cumplía 27 años, representó su gol número 59 en el año, igualando la marca establecida por Cristiano en 2013. No obstante, su actuación fue discreta, con varias ocasiones fallidas. El Sevilla, por su parte, no gana en Chamartín desde 2008 y volvió a sufrir la solidez de Courtois, figura indiscutible del partido con atajadas que evitaron el empate.
Durante la primera mitad, el Real Madrid mostró una versión apagada, con escasa conexión ofensiva. Los laterales Raúl Asencio y Fran García jugaron muy adelantados, mientras que Vinícius Jr y Rodrygo Goes buscaron espacios más por el centro. El Sevilla aprovechó esta falta de cohesión para generar peligro, especialmente con Isaac Romero y Alexis Sánchez, aunque sin efectividad.
La resistencia se rompió al filo del descanso, cuando Bellingham aprovechó un centro de Rodrygo desde una falta lateral para abrir el marcador con un impecable remate de cabeza. Ese gol alivió momentáneamente a la afición, que mostró su descontento en varios tramos del juego.
En la segunda parte, el Real Madrid mejoró en intensidad pero siguió sin un control total. Mbappé tuvo tres oportunidades claras, una de ellas desperdiciada al optar por definir en lugar de asistir a Vinícius Jr. En paralelo, el Sevilla amenazó con empatar, pero se topó con un inspirado Courtois, que frustró varias llegadas peligrosas.
La expulsión de Marcao por doble amarilla dejó al Sevilla con diez, pero eso no afectó la dinámica del juego. El ingreso de Eduardo Camavinga le dio más control al Madrid, aunque sin demasiada profundidad. Cuando el partido parecía al borde de la incertidumbre, Juanlu cometió una falta ingenua sobre Rodrygo dentro del área y el penalti fue transformado por Mbappé, quien celebró imitando a Cristiano Ronaldo.
La victoria permite al Real Madrid cerrar el año con buenas cifras, pero muchas interrogantes sobre su rendimiento colectivo. Courtois evitó que el resultado fuese distinto y Mbappé selló una marca histórica en medio de un juego sin brillantez.