Carlos Alcaraz, sigue con racha de victorias en las Finales ATP de Turín

El español Carlos Alcaraz tumbó este martes al estadounidense Taylor Fritz con una remontada (6-7(2), 7-5 y 6-3) en la segunda jornada de la fase de grupos de las Finales ATP de Turín, torneo en el que ya roza las semifinales y el número 1 del año.

El rugido de Carlos Alcaraz desarmó a la mejor versión de Fritz. Estuvo contra la lona el español. Pero nunca se fue del partido. Pudo con todo. Sus ‘¡Vamos!’ en los momentos de dificultad le mantuvieron a flote.

Destrozó la consistencia del americano. Fundió su batería. Creció en la adversidad. Supo gestionar la derrota en el primer set y acabó superando la prueba más exigente en lo que va de torneo. Las semifinales, a un paso. El número 1 del año, a una victoria ante el italiano Lorenzo Musetti. Si el australiano Alex de Miñaur gana a Musseti en el turno de tarde, estará matemáticamente en semifinales.

En el duelo de ganadores en la primera jornada, Alcaraz tuvo que sufrir mucho para frenar las acometidas de Fritz. Esta vez, más allá de su siempre espectacular ataque, brilló en defensa. Deslizó como si no fuera pista dura para llegar a los martillazos de Fritz, colocó bolas profundas, alternó lados… todo para frenar al americano, con el que amplió su cara a cara (5-1, sin contar la exhibición del Six Kings Slam).

El principal problema que se encontró Alcaraz fue que se enfrentó a un jugador que en Turín se siente como en casa. Semifinalista en 2022 y finalista en la pasada edición, donde solo Sinner le apartó del título. La pista cubierta y rápida le beneficiaron. Sus derechas fueron brutales. Sus saques un arma destructiva. Seis firmó en el primer envite, el doble que Alcaraz.

La igualdad del duelo se presentó desde el inicio. Casi 9 minutos de juego el primer servicio de Fritz. Casi otros 9 el del murciano. Casi 20 minutos para el empate a 1 y con opciones de ‘break’ para ambos. Paridad total. La rotura llegó en el tercero. Y fue Alcaraz, que no pudo después mantener su saque. El empate se mantuvo en el marcador. Pero las sensaciones fueron a peor por el nivel de Fritz.

Por eso cuando levantó un 4-3 y 0-30 abajo con su servicio intentó cambiar la dinámica. Se sintió fuerte desde el saque, dominador desde el fondo. Apareció el primer ‘¡vamos!’ ensordecedor cuando puso el empate a 4 que le permitió mantenerse a flote hasta el ‘tie-break’. Ahí, Fritz sacó sus mejores golpes. Dos roturas y 4 bolas de partido que el estadounidense cerró con un saque directo. Otro más.

Entró en trance Fritz. Todo le entró. Alcaraz incluso rió con algo de incredulidad cuando una derecha cruzada de su rival rozó la línea blanca. Lo positivo es que, ni aún así, Fritz consiguió despegarse en el marcador.

Le costaba más al de El Palmar mantener su saque. Mucho más que a un Fritz inspirado. Y con empate a dos en el segundo set, salvó bola de ‘break’ que le permitió llevarse el delo a la oreja, clásica celebración con la que encontró la complicidad y el apoyo de todo el público italiano en el Inalpi Arena de Turín.

Tuvo su oportunidad para romper y colocar el 5-3 a su favor, pero resistió en ese momento Fritz, primer momento de debilidad que mostró en realidad. Y lo aprovechó Alcaraz, cada vez más crecido. Dos bolas de set.

Cambiaron radicalmente las tornas. De estar contra las cuerdas a ser el claro favorito a llevarse un duelo igualado. Porque ambos así los sintieron Fritz supo que dejó vivo al español. Y Alcaraz estaba ya en modo arrollador. El tercer set, un trámite. Con un ‘break’, encarriló la remontada. Tuvo tres bolas de partido y Fritz sacó el último ápice de orgullo. A la cuarta, con su servicio, lo cerró. Las semifinales y el número 1 a final de año, a un paso.