El pasado miercoles, el paratleta salvadoreño Herbert Aceituno referente del parapowerlifting nacional, compartió este miércoles pasajes clave de su trayectoria deportiva y personal durante el evento “Una mañana para inspirarte, aprender y empoderarte”, realizado en la Biblioteca Nacional de El Salvador (BINAES).
La actividad fue organizada por la Fundación Venciendo Barreras, que eligió al medallista de bronce en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 para motivar a otros paratletas y a sus familias a través de un mensaje de resiliencia y determinación.
“Hay que creer en uno mismo, aceptarse y luchar por sus sueños”, recalcó Aceituno durante su ponencia interactiva.
El paratleta relató su inicio y ascenso en el parapowerlifting, un camino marcado, dijo, por la fe, la disciplina y el trabajo constante.
“Mis padres siempre me inculcaron a creer en mí mismo y que las barreras están en tu mente”, recordó.
Aceituno se ha consolidado como una de las máximas figuras del deporte paralímpico salvadoreño tras lograr en 2024 su tercera clasificación consecutiva a los Juegos Paralímpicos, sumándose a sus participaciones en Río 2016, Tokio 2020 y París 2024.
“Lo que Dios no me dio de altura, me lo dio en fuerza… Una discapacidad no te limita a ser grande”, enfatizó.
Su carrera deportiva comenzó en 2015, cuando decidió competir en eventos de potencia junto a atletas convencionales. Este año cumplió una década de trayectoria, un recorrido que, asegura, le ha enseñado a romper límites.
Aceituno también envió un mensaje especial a los padres de familia para que acompañen y apoyen los sueños de sus hijos.
“Es bonito poder decirles que no hay barreras, ese es el mensaje… El deporte te abre puertas y me siento agradecido de ser parte del mundo paralímpico”, expresó.
Al evento también asistieron los paratletas Mario Sayes, de boccia, e Irene Villedas, de parapowerlifting, quienes compartieron sus experiencias con los asistentes.
Herbert se ha consolidado como referente del deporte paralímpico tras lograr en 2024 su tercera clasificación consecutiva a los Juegos Paralímpicos. Río 2016, Tokio 2020 y París 2024 son las ediciones en las que Aceituno ha representado a El Salvador hasta el momento.
“Lo que Dios no me dio de altura, me lo dio en fuerza…Una discapacidad no te limita a ser grande”, enfatizó el paratleta.
La carrera de Aceituno comenzó en 2015 cuando decidió competir en eventos de potencia con atletas convencionales y este año cumplió una década de trayectoria deportiva.
Herber también compartió un mensaje inspirador a padres de familia a apoyar a sus hijos.
“Estoy agradecido con Dios, es bonito que te inviten a eventos y poder comentarles a los padres que no hay barreras, ese es el mensaje y que vean que sí se puede. Me siento agradecido de ser parte del mundo paralímpico, no hay barreras y el deporte te abre puertas”, comentó.
En la actividad también participaron los paratletas Mario Sayes, de boccia, e Irene Villedas, de parapowerlifting.
