Tom Brady, considerado el mejor mariscal de campo en la historia de la NFL, aseguró este viernes que, a sus 48 años, aún se siente en plenitud física y mental para regresar a los emparrillados. Sin embargo, su nuevo rol como propietario minoritario de los Las Vegas Raiders se lo impide.
“Creo que la respuesta sería, sí, estoy listo y podría volver, pero ya no me lo permiten porque soy propietario minoritario de los Raiders, así que no puedo salir del retiro”, expresó el siete veces campeón del Super Bowl, ahora comentarista de FOX Sports.
Brady reaccionó a la sorpresiva reaparición del también veterano Philip Rivers, quien fue contratado por los Indianapolis Colts a los 44 años, luego de cinco años inactivo. El exjugador confió en que su colega ofrecerá un buen rendimiento si se ha preparado adecuadamente.
“Si Philip ha estado practicando y haciendo lo que tiene que hacer, entonces todos lo veremos en plenas facultades y con una gran exhibición ante los Seattle Seahawks el próximo domingo”, comentó sobre el regreso de Rivers para la semana 15 de la NFL.
El exjugador de los New England Patriots y Tampa Bay Buccaneers defendió que, pese a la edad, los quarterbacks pueden mantenerse competitivos si conservan agilidad mental. Recordó una enseñanza de sus años universitarios con los Michigan Wolverines.
“Para el quarterback este juego es de la cabeza a los pies. En Michigan teníamos un dicho: ‘La mente es a la física como cuatro es a uno en la posición de quarterback’. La pregunta es ¿aún tienes la capacidad física para recibir golpes, pasar, ganar tiempo en la bolsa de protección? Si la respuesta es sí, estás dentro”, explicó.
Brady no ocultó su sorpresa cuando supo del regreso de Rivers, aunque bromeó sobre lo irónico del asunto, recordando que él mismo hizo algo similar. “¿Quién toma la decisión de retirarse y luego se ‘desretira’ si finalmente se va a retirar de nuevo? ¿Quién hace eso? Es ridículo que Philip haga eso”, dijo entre risas.
En febrero de 2022, Brady anunció su retiro definitivo, pero solo 40 días después volvió para jugar una temporada más con los Tampa Bay Buccaneers. Luego de ese ciclo, decidió colgar definitivamente los botines y asumir nuevos retos fuera del campo.