Estados Unidos advirtió este miércoles a Rusia que podría imponer nuevas sanciones si no toma medidas concretas para detener la guerra en Ucrania. El mensaje fue transmitido por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, durante la reunión del Grupo de Contacto para Ucrania, celebrada en Bruselas, con la participación de más de 50 países aliados.
“Ahora es el momento de poner fin a esta trágica guerra, detener el derramamiento de sangre innecesario y sentarse a la mesa de negociaciones”, manifestó Hegseth, quien lidera la estrategia de defensa bajo el Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El jefe del Pentágono advirtió que, si no se vislumbra un camino hacia la paz “en el corto plazo”, su país, junto a sus socios internacionales, tomará medidas necesarias para imponer costes al Kremlin por su “continua agresión” en territorio ucraniano.
Durante su intervención, Hegseth reafirmó el compromiso de su Departamento en reforzar tanto la capacidad militar de Ucrania como la estructura defensiva de la OTAN, en caso de que Moscú prolongue su ofensiva.
“Estamos preparados para hacer nuestra parte, especialmente en aquellas áreas donde solo Estados Unidos puede actuar”, puntualizó el secretario, dejando claro que Washington asumirá un papel central en el desenlace del conflicto.
Hegseth también elogió el papel del presidente Trump en la diplomacia internacional, tras el reciente acuerdo de paz en Gaza. “Trump sabe cómo forjar la paz y crear oportunidades en situaciones donde parece inalcanzable”, afirmó.
Y añadió con contundencia: “Esta no es una guerra que comenzó bajo el mandato de Trump, pero terminará bajo su mandato”, instando a aprovechar el momento político y diplomático para finalizar el conflicto armado en Europa del Este.

