Etiqueta: Esequibo

  • EEUU incrementa presencia militar en el Caribe y crece tensión con Venezuela

    EEUU incrementa presencia militar en el Caribe y crece tensión con Venezuela

    Estados Unidos ha intensificado su despliegue militar en aguas del Caribe y podría estar planeando ya ataques contra objetivos en Venezuela, lo que aumenta el temor a una ofensiva de Washington contra el Gobierno de Nicolás Maduro pese a que el propio Donald Trump negó hoy mismo esa posibilidad.

    Según periodistas especializados en defensa, las Fuerzas Armadas de EE.UU. ya han desplegado el crucero lanzamisiles USS Gettysburg en el Caribe, a donde habría llegado este viernes desde Norfolk en Virginia.

    Se sumaría así al crucero lanzamisiles USS Lake Erie, según indicaron el periodista Dan Lamothe de The Washington Post y el medio especializado The War Zone, que cita fuentes de la Marina de Estados Unidos.

    Además, en unos días se espera que llegue al Caribe el portaaviones USS Gerald Ford, el más moderno e importante de la flota estadounidense, que se unirá a la resto de efectivos navales que se encuentran frente a Venezuela.

    Ocho buques en el Caribe

    Con ello, EE.UU. pasará a tener ocho buques de guerra, seis de ellos destructores, tres buques anfibios y un submarino en la zona, con un total de trece efectivos navales, su mayor despliegue desde la primera Guerra del Golfo (1990-1991), según un estudio del Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).

    Un paso más allá fueron las informaciones de los diarios Miami Herald y The Wall Street Journal, que aseguraron, citando fuentes cercanas al Gobierno Trump, que Estados Unidos se prepara para bombardear en cualquier momento instalaciones militares dentro de Venezuela.

    Los ataques desde el aire podrían ocurrir «en cuestión de días o, incluso, horas», señaló el diario miamense, mientras que el medio neoyorquino matizó que «el presidente no ha tomado una decisión final sobre ordenar bombardeos en tierra».

    La ofensiva busca presionar a Maduro para que abandone el poder, de acuerdo con los funcionarios citados por los medios, que también afirman que el ataque es para desmantelar al Cartel de Los Soles y las redes de narcotráfico de Venezuela.

    El crucero lanzamisiles USS Lake Erie (derecha). @USNavy

    Blancos potenciales

    Los potenciales blancos bajo consideración son puertos y aeropuertos controlados por los militares que presuntamente se usan para traficar drogas, detalló el Wall Street Journal. Por su parte, el Washington Post reportó que, según indican documentos del Gobierno estadounidense, Nicolás Maduro ha solicitado apoyo para reforzar sus capacidades militares a Rusia, Irán y China.

    En concreto, el Post asegura que Caracas ha pedido a Moscú restaurar varios aviones Sukhoi Su-30 rusos adquiridos por Venezuela, los cuales Maduro considera «que representan el elemento disuasorio más importante del que dispone el Gobierno venezolano ante la amenaza de guerra».

    Venezuela también habría solicitado comprar misiles rusos, reparar motores y radares en Rusia, y también estaría buscando «apoyo logístico» no especificado y un plan de financiación a tres años por un monto desconocido a través de Rostec, el conglomerado estatal ruso de defensa.

    Trump niega cualquier plan para atacar territorio venezolano

    Pese a todo el ruido mediático, Trump negó hoy que Washington esté preparando una ofensiva militar.
    Trump fue preguntado cuando iba a bordo del Air Force One sobre las informaciones publicadas y respondió: «No, no son verdad».

    El mandatario no desarrolló su respuesta y volvió a dar la misma cuando se le repreguntó sobre decisiones militar contra Venezuela.

    En cambio, el secretario de Guerra, Pete Hegseth, fue más contundente al ser preguntado por la intensificación del despliegue, incluyendo el traslado de efectivos al Caribe.

    «Este aumento de tropas es intencional y continúa, y esperamos que finalmente se disipe y cambie la dinámica en nuestro hemisferio», dijo a los medios en Kuala Lumpur, donde se encontraba participando en la reunión de responsables de Defensa de la Asociación de Países del Sudeste Asiático (ASEAN).

    «Obviamente no voy a entrar en detalles sobre por qué las tropas están donde están en cada circunstancia, pero tienen una misión clara y la están cumpliendo», aseguró.

  • La ONU enfrenta desgaste global por guerra en Ucrania tras tres años y medio de conflicto

    La ONU enfrenta desgaste global por guerra en Ucrania tras tres años y medio de conflicto

    La guerra en Ucrania, iniciada con la invasión rusa en febrero de 2022, cumple tres años y medio y se ha convertido en uno de los mayores desafíos para la ONU. El conflicto no solo ha expuesto la falta de unidad internacional, sino que también ha generado fatiga en países emergentes y en desarrollo, que ahora mantienen posturas equidistantes o de silencio.

    En los primeros meses, las votaciones en la Asamblea General de Naciones Unidas mostraron un respaldo abrumador a Ucrania. Sin embargo, desde 2023 ese apoyo se ha diluido, marcado por divisiones diplomáticas y por la creciente atención internacional hacia Oriente Medio.

    El desgaste se acentuó en febrero de este año, cuando Estados Unidos sorprendió al alinearse con Rusia en una votación del Consejo de Seguridad sobre la invasión, al tiempo que inició conversaciones directas con Moscú. El presidente Donald Trump buscaba forzar una tregua, aunque el proceso resultó ser más complejo de lo previsto.

    Mientras tanto, en febrero de 2024, ministros europeos de Exteriores viajaron a Nueva York para reafirmar su apoyo a Kiev, aunque la percepción de “fatiga ucraniana” crecía en países como China e India, que refuerzan vínculos con Moscú, y en regiones de África y América Latina, que se mantienen al margen por considerar que no es un conflicto propio.

    China, India y Rusia refuerzan su bloque geopolítico

    En septiembre, la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) consolidó la alianza entre China, India y Rusia como un nuevo eje geopolítico. Junto a Corea del Norte, estos países rechazaron los intentos de Occidente de aislar a Vladímir Putin.

    La mediación de Washington para detener la guerra se produce además en un contexto de crisis financiera en la ONU, agravada por el recorte del apoyo económico de EE. UU. a varias agencias y organismos internacionales.

    “Muchos países que inicialmente apoyaron sólidamente a Ucrania se cansaron de los frecuentes votos y reuniones sobre la guerra, en parte porque era obvio que la ONU no podría afectar a las acciones de Rusia”, explicó a EFE Richard Gowan, analista del Crisis Group.

    El experto señaló que países como Brasil perciben que el fuerte apoyo militar de la OTAN prolonga el conflicto y reduce las opciones de una salida diplomática. A esto se suma la guerra en Gaza, que refuerza la percepción de un “doble rasero” en la postura europea hacia Palestina y Ucrania.

    Gowan considera que muchos países del sur global ven con buenos ojos las aperturas de Trump hacia Rusia, pero advierten que un eventual acuerdo que implique la cesión de territorios ucranianos sería problemático, pues contradiría la Carta de la ONU y generaría precedentes peligrosos para otras disputas, como la de Esequibo entre Venezuela y Guyana.