Etiqueta: María Corina Machado

  • El fundador de WikiLeaks denuncia a Fundación Nobel por "facilitar crímenes de guerra" con premio a Machado

    El fundador de WikiLeaks denuncia a Fundación Nobel por «facilitar crímenes de guerra» con premio a Machado

    El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, presentó este miércoles una denuncia penal en Estocolmo contra la Fundación Nobel por facilitar supuestamente la comisión de crímenes de guerra al haber otorgado el Nobel de la Paz a la líder opositora venezolana María Corina Machado.

    Según un comunicado de la organización de Assange, 30 individuos vinculados con la Fundación han cometido, en concreto, delitos de apropiación indebida grave de fondos, facilitación de crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad y de financiación del crimen de agresión.

    Con el galardón a Machado, la Fundación Nobel, incluida la presidenta Astrid Söderbergh Widding y la directora ejecutiva, Hanna Stjärne, han convertido «un instrumento de paz en un instrumento de guerra», denunció la organización, en contra de lo estipulado de forma vinculante por el testamento de Alfred Nobel, que mandaba conferir el premio a quien hubiera realizado la mayor obra por la fraternidad entre las naciones.

    Por el contrario, la «incitación» por parte de Machado al que supone el mayor despliegue militar de EE. UU. desde la guerra de Irak la hace «categóricamente inelegible» para el Nobel de la Paz, argumentó Assange.

    «Machado ha seguido incitando a la Administración Trump a seguir con su camino de escalada», aseguró el fundador de WikiLeaks.

    «Usando su posición elevada como receptora del Premio Nobel de la Paz, Machado bien puede haber inclinado la balanza a favor de la guerra, facilitada por los sospechosos nombrados», agregó, en alusión a los miembros de la Fundación.

    La denuncia incluye a modo de prueba declaraciones en las que Machado, según Assange, ha alentado a Washington a intervenir militarmente en Venezuela y ha justificado los ataques estadounidenses contra barcos civiles frente a las costas del país caribeño.

    En este contexto, la entrega del premio a la opositora venezonala, incluido el desembolso pendiente de 11 millones de coronas suecas -aproximadamente un millón de euros- supondría un delito de apropiación indebida grave.

    Además, existe un «riesgo real» de que los fondos sean desviados de manera que contribuyan indirectamente a financiar crímenes de guerra por parte de EE. UU., violando con ello las obligaciones estatales de Suecia bajo el Estatuto de Roma, señala la denuncia.

    Por todo ello, Assange solicita a las autoridades suecas que congelen la transferencia del premio monetario a Machado y soliciten la devolución de la medalla, además de investigar a la Fundación por los crímenes ya citados.

    Machado se encuentra actualmente en Noruega, a donde llegó en la madrugada del pasado 11 de diciembre tras un accidentado viaje que no le permitió llegar a tiempo para la ceremonia de entrega del premio, aunque sí participó en diversos actos oficiales en Oslo en compañía de su familia y de otros líderes de la oposición venezolana.

  • Petro llama “dictador” a Maduro pero niega que sea narcotraficante

    Petro llama “dictador” a Maduro pero niega que sea narcotraficante

    El presidente de Colombia, Gustavo Petro, calificó este miércoles como “dictador” a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, aunque rechazó la acusación de que tenga vínculos con el narcotráfico. El pronunciamiento marca un giro en el discurso del mandatario colombiano, quien había evitado previamente ese tipo de calificativos hacia el líder chavista.

    “Maduro es dictador por concentrar poderes, no hay ninguna evidencia en Colombia de que sea narco. Esa es narrativa de Estados Unidos”, escribió Petro en su cuenta de X (antes Twitter), en respuesta a una periodista que le reprochó su dureza hacia líderes como José Antonio Kast en Chile, mientras evitaba llamar “narcotraficante” a Maduro.

    Petro ha sido uno de los pocos mandatarios latinoamericanos que ha mantenido una relación diplomática activa con el gobierno de Venezuela. Sin embargo, su comentario representa la primera vez que se refiere públicamente a Maduro como dictador, una expresión que tradicionalmente ha evitado en foros oficiales.

    En su mensaje, Petro también reiteró sus críticas contra el presidente electo de Chile, José Antonio Kast, a quien tildó de nazi. Justificó su acusación señalando que “Kast es hijo y creyente de los nazis” y afirmó que pertenece a una generación alemana que emigró tras la derrota del Tercer Reich, no para huir de Hitler, sino de su caída.

    Las relaciones entre Petro y Maduro se han tensado en los últimos meses, principalmente por el proceso electoral venezolano de julio de 2024, marcado por la inhabilitación de la líder opositora María Corina Machado y el rechazo internacional a los resultados. Petro ha cuestionado la falta de garantías democráticas, aunque también ha rechazado las sanciones impuestas por Estados Unidos contra el régimen chavista.

    A pesar de las fricciones recientes, el gobierno de Colombia no ha reconocido oficialmente el resultado de las elecciones venezolanas. Petro, al igual que el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, ha mostrado una postura crítica hacia el proceso, sin llegar a romper los lazos diplomáticos con Caracas.

    El presidente colombiano ha insistido en varias ocasiones en la necesidad de una salida negociada a la crisis venezolana, y ha propuesto el diálogo como única vía para lograr una transición democrática en ese país. Sin embargo, su nuevo lenguaje sugiere un posible endurecimiento de su postura ante el estancamiento político y los señalamientos internacionales contra Maduro.

    La declaración de Petro también evidencia una creciente presión política interna y externa para que el mandatario colombiano adopte una posición más firme ante las violaciones a los derechos humanos en Venezuela, tema que ha generado divisiones entre los gobiernos progresistas de América Latina.

     

     

  • María Corina Machado se fracturó una vértebra durante su huida de Venezuela

    María Corina Machado se fracturó una vértebra durante su huida de Venezuela

    La opositora venezolana y premio Nobel de la Paz 2025, María Corina Machado, sufrió una fractura vertebral y otras lesiones durante su huida de Venezuela, ocurrida el pasado lunes, mientras intentaba llegar a Noruega para asistir a la ceremonia de entrega del galardón en Oslo.

    Según información publicada por el diario noruego Aftenposten, Machado emprendió una travesía en una pequeña embarcación pesquera, enfrentando condiciones climáticas adversas en alta mar. Su escape incluyó un viaje de al menos cinco horas hasta la isla de Curazao, donde posteriormente abordó un avión rumbo a Oslo, con escala en Estados Unidos.

    Una vez en la capital noruega, Machado acudió al Hospital Universitario Ulleval, donde médicos confirmaron la fractura de una vértebra. El hecho fue corroborado por Magalli Meda, exjefa de campaña de “Comando Con Venezuela”, quien acompañó de cerca el operativo de salida.

    La activista, que según medios locales habría salido disfrazada y usando peluca para evitar ser detectada por el régimen de Nicolás Maduro, no logró llegar a tiempo a la ceremonia del Premio Nobel de la Paz, celebrada el jueves por la tarde. En su lugar, fue su hija, Ana Corina Sosa, quien subió al estrado para recibir el reconocimiento en nombre de su madre.

    El galardón fue otorgado a Machado por su lucha cívica en favor de la democracia en Venezuela, y su figura se ha convertido en uno de los símbolos de resistencia frente al autoritarismo. Su huida revive las alarmas sobre la represión política en el país sudamericano, especialmente contra líderes opositores que enfrentan restricciones, detenciones y vigilancia constante.

  • El Premio Nobel a María Corina Machado reta el control de Maduro en Venezuela

    El Premio Nobel a María Corina Machado reta el control de Maduro en Venezuela

    La sorpresiva llegada de María Corina Machado a Oslo el jueves, tras meses de permanecer fuera del radar oficial y múltiples obstáculos para salir de Venezuela, ha reactivado el debate internacional sobre la capacidad real de la oposición para impulsar una transición política y los límites del control del régimen de Nicolás Maduro.

    Machado se convierte así en la primera figura opositora en más de una década en combinar respaldo interno con legitimidad internacional. Su reconocimiento con el Premio Nobel no es solo simbólico: el Comité Noruego envió un mensaje claro a favor de una salida democrática, diplomática y pacífica del poder por parte del «régimen» venezolano.

    En su discurso de aceptación —leído por su hija Ana Corina Sosa—, Machado aseguró que el tiempo fuera de la vida pública le permitió construir nuevas redes cívicas y preparar “una transición ordenada hacia la democracia”.

    Este movimiento no solo refuerza su figura como lideresa opositora, sino que golpea directamente el relato oficial del chavismo sobre el control absoluto del territorio y los movimientos de la oposición. Para la politóloga colombiana Sandra Borda, “la salida y eventualmente el regreso de ella pueden significar también un proceso de deterioro del control que mantiene el Gobierno sobre el territorio”.

    Aunque el regreso no representa por sí solo una amenaza para el chavismo, Borda considera que el impacto dependerá de si se combina con una estrategia internacional coherente: “Si no está acompañada de presión internacional, estratégicamente construida para sacar a Maduro del poder, lo suyo sola no va a ser suficiente”.

    El respaldo de Washington fue clave para facilitar la salida de Machado, en un contexto regional en el que Estados Unidos mantiene presencia aeronaval en el Caribe y el presidente Donald Trump ha retomado conversaciones con Maduro. “Habría que ver en qué está Washington, si está entendiendo esto como una oportunidad para intensificar la disuasión que está ejerciendo en el Caribe”, añadió Borda.

    Mientras tanto, la comunidad internacional ha mostrado posturas divididas. Panamá, Argentina, Paraguay y Ecuador asistieron a la ceremonia del Nobel como señal de apoyo, mientras que países como México, Brasil y Colombia adoptaron una posición más cautelosa. Cuba, Nicaragua, Rusia e Irán condenaron el premio, calificándolo como una “intervención”.

    La figura de Machado revive inevitablemente el recuerdo de Juan Guaidó, quien en 2019 fue reconocido por más de 50 gobiernos como presidente interino, sin lograr desplazar a Maduro. Hoy, exiliado en Miami, Guaidó representa un precedente que alerta sobre los límites del respaldo internacional sin acciones concretas dentro de Venezuela.

    “El oficialismo ha logrado abroquelarse con eficacia”, indicó el internacionalista argentino Juan Battaleme, aunque reconoció que “por primera vez, la presión de Trump parece abrir fisuras en ese cierre del oficialismo”.

    Battaleme sostiene que Machado cuenta con una base más sólida que Guaidó: “Su figura como líder de la resistencia es más fuerte”. No obstante, Borda advierte que, sin acciones más contundentes, el chavismo resistirá como lo ha hecho antes. “Estos golpes de legitimidad internacional han sucedido antes (…) pero sin un esfuerzo adicional mucho más duro, no produce un desplazamiento del régimen”, dijo.

    Ambos analistas coinciden en que el premio Nobel es un capital simbólico relevante, pero su verdadero impacto dependerá del regreso de Machado a Venezuela. Si el régimen permite su entrada, sería un gesto de debilidad inédito. Si decide forzar su salida, repetiría el patrón de 2019, cuando eliminó toda presencia opositora visible en el país.

    La verdadera prueba política comenzará cuando Machado intente regresar. Ese momento marcará si su presencia internacional representa un punto de inflexión real para la oposición o si se convertirá en otro impulso simbólico sin capacidad de alterar el poder del chavismo.

     

  • Veterano de EEUU que evacuó a Machado dice que es difícil sacar a Maduro vivo de Venezuela

    Veterano de EEUU que evacuó a Machado dice que es difícil sacar a Maduro vivo de Venezuela

    Bryan Stern, el veterano de guerra de EE.UU. que dirigió la operación secreta para evacuar por mar y disfrazada a la opositora María Corina Machado de Venezuela, dijo este viernes que estaría encantado de participar en una operación para extraer al presidente de ese país, Nicolás Maduro, aunque sostuvo que resultaría difícil sacarlo con vida.

    «Me encantaría, y lo pienso todos los días, pero sacarlo con vida es difícil. Matarlo probablemente sería bastante sencillo, pero sacarlo con vida y llevarlo ante la justicia creo que sería muy difícil», afirmó en una rueda de prensa virtual Stern, fundador de Bull Rescue Foundation, que se especializa en el «rescate de estadounidenses y aliados de zonas de conflicto y desastre» según su página web.

    No obstante, el exmilitar estadounidense aseguró que en su organización no son «sicarios o asesinos», sino que se dedican a salvar vidas, por lo que si el Gobierno estadounidense les pide participar en una operación en Venezuela, su respuesta dependería «de cuál fuera la petición».

    «Mantenemos una excelente relación con el Gobierno de Estados Unidos, en particular con el cuerpo diplomático, las fuerzas armadas y la comunidad de inteligencia», añadió Stern.

    Sobre la operación para sacar a Machado de Venezuela, Stern dijo que fue pagada por «donantes generosos», que vinculó con ciudadanos venezolano-estadounidenses que sienten rechazo por el gobierno de Maduro.

    La huida, según relató, duró entre 15 y 16 horas e implicó transporte terrestre, marítimo y aéreo para que la líder opositora venezolana pudiera recoger el Nobel de la Paz en Noruega esta semana.

  • Hija de Machado dice que es consciente que su madre correrá peligro al volver a Venezuela

    Hija de Machado dice que es consciente que su madre correrá peligro al volver a Venezuela

    Ana Corina Sosa, la hija de la Premio Nobel de la Paz, María Corina Machado, dijo que es consciente de que al regresar a Venezuela su madre correrá peligro pero a la vez sabe que su misión está en su país y que no descansará hasta verlo otra vez libre.

    «Tienen que entender que su regreso en estas condiciones es un riesgo y que mi mamá va a correr peligro, dijo Sosa en entrevista concedida a EFE en Oslo, donde se reencontró con su madre tras dos años de separación forzada.

    » Pero sé que la misión que ella lleva es más grande que nosotros en este momento y que ella lo hace por nuestro futuro y para que podamos volver a estar en Venezuela y finalmente en paz y libertad y unidos como familia. Nos da fuerza saber que ella está haciendo algo noble y que lo está haciendo por nosotros», afirmó.

    Sosa manifestó que es difícil poner en palabras lo que había significado volver a abrazar a su madre.

    «Es difícil ponerlo en palabras. Han sido dos años que no nos habíamos visto en persona pero se han sentido más largos porque el país ha atravesado tantas cosas y sobre todo mi mamá ha enfrentado unos riesgos enormes y amenazas en contra de su vida a diario», señaló

    A la vez, Sosa recordó en la entrevista la situación de otros venezolanos que no tienen la expectativa de un reencuentro con sus seres queridos y ni siquiera saben dónde están.

    «El sufrimiento de los venezolanos es muy real. Mientras teníamos esa expectativa y esa certeza de que nos íbamos a ver porque ya había cruzado el mayor riesgo y estaba segura y sin peligro también recordamos que hay millones de venezolanos que tienen más de diez años sin ver a sus familiares y hay venezolanos que ni siquiera saben si sus seres queridos están vivos y que se encuentran presos o desaparecidos», reflexionó.

    Sosa dijo que lo que siente ahora, ante el hecho de saber que su madre va a volver a Venezuela y que van a tener que volver a separarse.

    «Por un lado no quiero que se vaya, la quiero abrazar y esconderla y que se quede y poder vivir una vida normal como familia, disfrutar la vida normal, ir a los mercaditos de Navidad que están allí fuera. Una tiene como ese deseo y el impulso natural y humano de disfrutar la vida normal», indicó.

    «Pero hemos tenido muy presente que si bien tenemos a mi mamá por un instante sabemos que su corazón y su misión y su meta están en Venezuela y ella ha dicho muy claro a los venezolanos que va a volver, que su trabajo no ha terminado y yo sé que los venezolanos conocen a María Corina muy bien y que su misión es en Venezuela hasta que el país sea libre», subrayó.

    Al ser preguntada por lo que había significado para ella la ceremonia de entrega del premio, en la que representó a su madre que no alcanzó a llegar a tiempo a Oslo, expresó que había sido un honor enorme, también como venezolana

    «La situación que se vive en Venezuela no es un tema de derecha o de izquierda sino de claridad moral, de dignidad, de defensa de la democracia, de principios de libertad» , indicó Sosa, quien celebró que eso hubiera quedado claro en el discurso del presidente del Comité Nobel, Jørgen Watne Frydnes.

    «Ese discurso ha sido una inyección de fuerza, ha mostrado que nuestra causa es justa y que el mundo nos reconoce», aseguró.

    «Quiero decirle a los venezolanos que la libertad es algo por lo que se lucha todos los días y si algo aprendimos de nuestros padres es que no se puede dar por sentado. Ojalá la lucha que estamos llevando (a cabo) en Venezuela sea un ejemplo para el mundo», agregó.

  • María Corina Machado no planea viajar a España, sino regresar lo antes posible a Venezuela

    María Corina Machado no planea viajar a España, sino regresar lo antes posible a Venezuela

    La líder opositora venezolana y Premio Nobel de la Paz, María Corina Machado, no tiene previsto viajar a España o emprender una gira europea una vez abandone Oslo, sino centrarse en planificar su regreso a Venezuela, a donde quiere volver lo antes posible, según dijeron a EFE fuentes cercanas a la exdiputada.

    «No hay ningún plan para ir a España. Ella lo que está haciendo ahora es su plan de regreso a Venezuela», señalaron las fuentes, que añadieron que tampoco hay prevista una gira por otros países europeos.

    Fuentes de su partido en España confirmaron que no les consta que la opositora tenga previsto pasar por España antes de regresar a su país, une vuelta que prevén «con riesgos».

    «Los movimientos que ella haga se anunciarán en su momento y obviamente son de bastante reserva y discreción por lo que representa su figura», añadieron desde el entorno de María Corina en España.

    Machado, que llegó a Oslo el jueves de madrugada en un viaje complicado desde Venezuela, donde vive en la clandestinidad, ha asegurado que era su deber llegar a la capital europea aunque fuera horas después de la ceremonia de entrega del premio para llevarlo de vuelta a los venezolanos.

    En este contexto ha dicho que quiere regresar «pronto» a Venezuela, al igual que reiteraron este viernes las fuentes en Oslo.

    Esta vuelta «será lo antes posible», dijo la víspera la propia Machado, aunque aún no hay fecha ni tampoco detalles de cómo se realizará o si EE.UU. también le apoyará en esta tarea, tal y como hizo para ayudarle a llegar a Oslo.

    Pero será «cuando se den las condiciones propicias» para su seguridad, lo que no depende de que continúe Maduro en el poder, recalcó la política.

    Además de pasar tiempo con su familia apenas llegó a Oslo Machado ha mantenido una intensa agenda en la capital noruega.

    El jueves la exdiputada visitó el Parlamento noruego y se reunió con el primer ministro, Jonas Gahr Støre, además de inaugurar oficialmente una muestra sobre su lucha por la democracia y la libertad en su país, mientras que este viernes fue recibida en audiencia por los reyes de Noruega y mantuvo varias reuniones.

  • “Nos esperan días muy duros", dijo María Corina Machado en una visita a Diario El Mundo en 2013

    “Nos esperan días muy duros», dijo María Corina Machado en una visita a Diario El Mundo en 2013

    Una mujer delgada y extrovertida entró en la sala de reuniones de Diario El Mundo en el centro de San Salvador una mañana de septiembre de 2013. Vestía un traje blanco de sastre con una blusa verde amarela, saludó con esa amabilidad y desenfado propio de los venezolanos, amigable, sumamente cordial. Pero cuando empezamos a dispararle nuestras preguntas, María Corina Machado respondió con el mismo temple y la firmeza con que la hemos visto enfrentar a Hugo Chávez y Nicolás Maduro, los dictadores venezolanos con los que le ha tocado lidiar desde sus días de diputada.

    De esa entrevista con Diario El Mundo, publicada el 4 de septiembre de 2013, quedaba entonces su firme convicción de que “Venezuela volverá a ser un referente a la democracia para la región y para el mundo”.

    “Hemos aprendido mucho”, dijo entonces y se lamentaba que “los venezolanos hemos perdido toda la confianza en las instituciones, en la justicia, en la Policía, en la Fiscalía, en el poder electoral, en la Asamblea, incluso en el respeto al voto”.

    Machado, quien llegó acompañada de la también diputada venezolana Dinorah Figueroa, lamentaba que “lo más grave ha sido el ataque a la cohesión social”, donde de manera intencionada y sistemáticamente “se ha pretendido dividir a la población, bajo todo criterio, racial, generacional, económico, religioso”.

    “Es nuestro gran desafío, más allá de reconstruir, porque se ha ido acumulando una capacidad creadora, pero nuestro mayor desafío va a ser esa cohesión social”, decía entonces y 12 años después, Machado sigue luchando.

    La entrevista con María Corina Machado publicada en septiembre de 2013.

     

    El miedo, hilo conductor

    Machado dijo entonces que “el miedo se ha convertido en el hilo conductor y un miedo que se le mete en los tuétanos”.

    “(La dictadura venezolana) intenta hacerle sentir a todo aquel que disiente que es un enemigo de la revolución y que va a pagar por eso”, denunciaba Machado que calificaba al régimen chavista de “una neodictadura, un régimen profundamente totalitario que se disfraza de democracia, que además tiene una receta clara para lograr ese control progresivo de la sociedad, y se ha ido repitiendo y perfeccionando”.

    Y vaya que tenía razón. El régimen impidió a Machado, siendo la figura opositora más popular del país, postularse a las elecciones de 2024 y la alianza opositora postuló a Edmundo González Urrutia, quien ganó ampliamente los comicios que luego Maduro le arrebató en un fraude monumental donde no pudo ni mostrar las actas de una sola urna.

    «Quienes nacimos y crecimos en democracia, no tuvimos conciencia de cómo preservarla y cuidarla», se lamentaba. Una frase que la hemos escuchado repetir estos días.

    Machado, en 2013, como ahora, siempre habló de democracia como el único camino para recuperar su país, pero con la convicción que sería un camino duro.

    “Nos esperan días muy duros para quienes están absolutamente comprometidos a defender los valores de la democracia”, dijo a Diario El Mundo en 2013 y así ha sido.

     

  • Machado denuncia que Venezuela ya está invadida por rusos, iraníes, y terroristas de Hezbolá y Hamás en Venezuela

    Machado denuncia que Venezuela ya está invadida por rusos, iraníes, y terroristas de Hezbolá y Hamás en Venezuela

    La dirigente opositora María Corina Machado afirmó este jueves que Venezuela “ya ha sido invadida” por “agentes rusos, iraníes y grupos terroristas como Hezbolá y Hamás”, durante una conferencia de prensa en Oslo, Noruega, tras recibir el Premio Nobel de la Paz. Machado permanecía en paradero desconocido desde 2024, luego de ser excluida de las elecciones presidenciales, en las que la oposición terminó respaldando a Edmundo González.

    Al ser consultada sobre si apoyaría una invasión de Estados Unidos a Venezuela, Machado respondió que no es necesaria.

    “Venezuela ya ha sido invadida. Hay agentes rusos, agentes iraníes y grupos terroristas como Hezbolá y Hamás operando libremente, coordinados con el régimen”, denunció. Además, indicó que también hay presencia de guerrillas colombianas y cárteles de droga, y acusó a estas estructuras de participar en “tráfico de personas y prostitución”.

    La opositora aseguró que Venezuela “se ha convertido en el centro del crimen de América” y afirmó que el régimen se sostiene por un “sistema represor bien financiado” a través del narcotráfico, contrabando de petróleo, armas y trata de personas.

    “Una vez que pase y se debilite la represión, se acabó. Es lo que le queda al régimen: violencia y terror”, advirtió. Machado pidió a la comunidad internacional “cortar esas fuentes” y responsabilizó a “otros regímenes” de apoyar al gobierno de Nicolás Maduro para mantener operaciones criminales en América Latina.

    La líder opositora pidió ayuda a «los países democráticos» para bloquear los ingresos que sostienen «la estructura represiva del régimen» de Nicolás Maduro.

    Machado subrayó que el «régimen» de Maduro «se apoya en regímenes totalitarios para atacar a millones de venezolanos», y pidió al mundo ayuda para bloquear el ingreso de los recursos que soportan dicha estructura.

    Machado añadió que Maduro se apoya en «sistemas criminales» y que se necesita que las democracias del mundo respalden a los ciudadanos de Venezuela.

    Desde la capital noruega, Machado expresó su intención de regresar a Venezuela, aunque no reveló cuándo ocurrirá.

    “Cuando vuelva, si el régimen sigue en el poder, estaré con mi gente. No sabrán dónde estoy”, declaró junto al primer ministro noruego, Jonas Gahr Store. La opositora venezolana relató que no alcanzó a llegar a tiempo para la ceremonia de entrega del Nobel, pero aseguró: “Les prometí que vendría aquí en su nombre para recibir el premio y que les llevaría de vuelta ese premio”.

    Finalmente, Machado elogió el modelo democrático noruego y manifestó su esperanza de ver una Venezuela libre y próspera.

    “Convertiremos a Venezuela en ese nudo energético, tecnológico y democrático de América”, prometió. “Espero con ansias el día en el que les acogeremos en un país brillante, democrático y libre, y eso es algo que pasará pronto”, concluyó.

     

  • María Corina Machado confirma que recibió apoyo de EEUU para salir de Venezuela

    María Corina Machado confirma que recibió apoyo de EEUU para salir de Venezuela

    La líder opositora venezolana María Corina Machado confirmó este jueves que recibió ayuda de Estados Unidos para salir de Venezuela y poder llegar a Oslo, donde ayer su hija, Ana Corina Sosa, recibió el Premio Nobel de la Paz en su nombre.

    «Sobre si he recibido apoyo del gobierno de Estados Unidos para que yo pudiera llegar a Oslo, la respuesta es sí», dijo Machado, ante las preguntas de periodistas en la capital noruega.

    La aeronave inició su travesía el martes por la noche desde el Aeropuerto Ejecutivo de Opa Locka, en Miami, Florida, con destino al Aeropuerto Hato de Willemstad, Curazao, una isla situada a solo 65 kilómetros de la costa venezolana. Esto fue confirmado por datos de plataformas de rastreo aéreo como FlightRadar24 y FlightAware.

    El miércoles a las 6:42 a.m. (hora local), el vuelo despegó de Curazao y se dirigió a Bangor, Maine, en el noreste de Estados Unidos, para una escala técnica. Posteriormente, continuó su ruta hacia el Aeropuerto de Oslo Gardermoen, su destino final, en un trayecto de más de seis horas.

    En total, la operación logística, que se considera una de las más discretas en la historia reciente de un galardonado con el Nobel, abarcó una distancia aérea superior a los 9,000 kilómetros.

    La venezolana no desveló más detalles de cómo fue su salida, más allá de que en una rueda de prensa con el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, esta mañana agradeció «a todos esos hombres y mujeres que arriesgaron sus vidas» para que pudiera estar en Oslo.

    Machado llegó esta madrugada a Oslo después de estar más de un año en la clandestinididad en Venezuela y en una rueda de prensa afirmó que «pronto» estará de vuelta en Venezuela.

    «Mi deber era venir para recoger este premio para llevarlo de vuelta a los venezolanos. Pronto estaré de vuelta en Venezuela y sé que muy pronto ustedes también», dijo en una rueda de prensa en el Instituto Nobel Noruego, aludiendo a los exiliados.

    Esta vuelta «será lo antes posible», aunque aún no hay fecha ni tampoco hay detalles de cómo se realizará. De momento, la opositora venezolana reveló que aprovechará para pasar «algunas horas» con sus amigos y la familia, para hacer «visitas a médicos», y también realizará «algunas reuniones que serán muy útiles antes de volver».

    La BBC dice que los detalles de su viaje a Oslo se mantuvieron tan en secreto que ni siquiera el Instituto Nobel sabía dónde se encontraba ni si llegaría a tiempo para la ceremonia de entrega del premio, que fue recibido en su nombre por su hija, Ana Corina Sosa.

    Según el Wall Street Journal, para escapar de Venezuela, Machado se disfrazó, logró pasar 10 controles militares sin ser descubierta y se escapó en una lancha de madera desde un pueblo pesquero costero. El plan se gestó durante dos meses, según el rotativo, que cita a una persona cercana a la operación.

    Para la huida contó con la asistencia de una red venezolana que ayuda a las personas a huir del país. EFE