El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró este jueves que el país continuará su lucha contra todos aquellos “enemigos” que intenten rearmarse y socavar la seguridad nacional. Durante su discurso conmemorativo por los ataques del 7 de octubre, reiteró su compromiso de llevar la batalla “hasta alcanzar la victoria”.
“Lo que necesitamos es unidad. Unidad en la guerra y unidad en la paz. Lograremos todos nuestros objetivos si tenemos cohesión interna, garantías mutuas y si reforzamos aquello que nos une en vez de lo que nos divide”, expresó Netanyahu, durante los actos oficiales organizados según el calendario hebreo.
El mandatario destacó que Israel, en medio de un entorno hostil, sigue siendo una “roca sólida” en Oriente Próximo. También recordó a las víctimas del ataque del 7 de octubre y elogió la fortaleza de los heridos: “Es increíble ver a gente amputada con tal fortaleza, con un gran espíritu, que siguen adelante por el bien de su país”.
Netanyahu criticó duramente al régimen de Irán, al que acusó de intentar “ahogar a Israel hasta la muerte” mediante sus “ramas terroristas”. Sin embargo, aseguró que sus enemigos subestimaron la capacidad de reacción israelí. “Nos levantamos como un solo hombre, luchamos en todos los frentes, y quien nos ataque pagará un alto precio por su agresión”, afirmó.
El jefe del gobierno israelí afirmó que el país libra una batalla que va más allá de sus fronteras: “Israel es la barrera que frena a las fuerzas destructivas del islam radical. Esta es una lucha global entre la humanidad y la peor de las crueldades”.
Por su parte, el presidente Isaac Herzog llamó a la población a dejar de lado la polarización política y social que —dijo— “horroriza”, especialmente “ahora que seguimos enterrando a nuestros muertos”. “Si elegimos unirnos en torno a una bandera y un sentido común, no habrá nada que no podamos lograr”, declaró.
Herzog agradeció a los soldados caídos, a quienes calificó como “héroes que serán para siempre una fuente de fortaleza para todos”. También expresó que el regreso de los rehenes bajo el plan de paz propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene un “peso histórico y emocional enorme”.
Finalmente, el presidente israelí instó a no descansar hasta recuperar todos los cuerpos de los rehenes fallecidos. “Debemos actuar por todos los medios posibles hasta que cada uno de los rehenes muertos sean traídos de vuelta”, concluyó.




