Etiqueta: Othmane Maamma

  • El lateral del PSG, Achraf Hakimi, gana el trofeo como mejor jugador africano del 2025

    El lateral del PSG, Achraf Hakimi, gana el trofeo como mejor jugador africano del 2025

    El lateral del PSG, de 27 años, cerró un 2025 de ensueño al conquistar el triplete —Liga y Copa de Francia, además de la Liga de Campeones— bajo la dirección técnica del español Luis Enrique Martínez. El marroquí acumuló 55 partidos, 11 goles y 14 asistencias, cifras que le valieron un reconocimiento individual pese a la grave lesión de tobillo que sufrió en Champions ante el colombiano Luis Díaz, del Bayern Múnich. Su aporte también fue determinante para la clasificación de Marruecos al Mundial 2026.

    En la rama femenina, la marroquí Ghizlane Chebbak, de 35 años y figura del Al Hilal, se quedó con el premio al superar a su compatriota Sanaa Mssoudy (AS FAR) y a la nigeriana Rasheedat Ajibade, exjugadora del Atlético de Madrid y actualmente en el PSG. Chebbak sucede en el trono a la zambiana Barbra Banda.

    El galardón a entrenador del año fue para el caboverdiano Pedro Leitao “Bubista”, responsable de llevar por primera vez a Cabo Verde a una fase final mundialista, tras liderar un grupo que incluía a Camerún.

    En la categoría de mejor portero, el marroquí Yassine Bonou (Al Hilal), ex del Sevilla, volvió a imponerse; mientras que en la rama femenina la nigeriana Chiamaka Nnadozie (Brighton) sumó su tercer premio consecutivo.

    El reconocimiento a jugador joven del año recayó en el marroquí Othmane Maamma, de 20 años, del Watford inglés. En la rama femenina la ganadora fue su compatriota Doha El Madani, también de 20 años y jugadora del AS FAR.

    Finalmente, el premio a mejor selección nacional de 2025 fue para Marruecos sub-20, campeona del Mundial de la categoría tras vencer a Argentina; mientras que en la rama femenina el galardón correspondió a Nigeria.

  • Marruecos derrota a Argentina y conquista el Mundial sub-20

    Marruecos derrota a Argentina y conquista el Mundial sub-20

    Marruecos completó este domingo una hazaña en el fútbol y se convirtió en el segundo país africano, tras Ghana en 2009, en ganar un Mundial sub-20 al derrotar a Argentina por 0-2 en la final del torneo disputado en Chile.

    Es el título más importante para el fútbol de Marruecos, cuya selección juvenil disputó este domingo en el estadio Nacional de Santiago un partido que jugó con orden, inteligencia y que supo definir pronto en el primer tiempo.

    El encuentro comenzó vertiginoso y con polémica, porque a los diez minutos Zabiri ganó un balón en largo y el portero argentino lo atropelló cuando el africano se disponía a rematar en esa zona difusa de la línea que delimita el área.

    El técnico magrebí decidió pedir la revisión por un posible penalti y el árbitro del juego, el italiano Maurizio Mariani, objetó que el delantero marroquí no estaba en posesión del balón (en realidad había rematado al arco) y decretó tarjeta amarilla al portero albiceleste y falta en la frontal.

    Sin embargo, el propio Zabiri la ejecutó con maestría, al ángulo derecho de la portería, y le dio la ventaja a Marruecos, que estaba mejor plantado que la Albiceleste.

    Sobre todo en la banda derecha del ataque africano, donde Julio Soler nunca pudo con la velocidad y la gambeta de Othamne Maamma, uno de los mejores jugadores de Marruecos.

    Una jugada el extremo del Watford a los 28 minutos sirvió para doblar la ventaja: ganó en velocidad un pase largo, se deshizo con facilidad del capitán argentino, y su pase de la muerte lo colocó en la red un inspirado Zabiri.

    Era la primera vez en todo el torneo que Argentina iba por debajo en el marcador, la primera que le hacían dos goles y los nervios comenzaron a aflorar.

    Con la selección desdibujada, el técnico Diego Placente tampoco ayudó: a los 30 minutos decidió retirar a Acuña y dar entrada a Mateo Silvetti en busca de su velocidad e idilio con el gol, sin observar dónde estaba el problema.

    El delantero del Inter Miami tuvo una opción en el minuto 44 que no supo definir, pero quien pudo sentenciar el partido a favor de Marreucos un minuto después fue Maamma, que volvió a superar con facilidad a Soler, pero su disparo, flojo, lo sacó la defensa cuando ya se colaba.

    La segunda mitad arrancó con la misma dinámica: Argentina atropellada en busca de un gol a la desesperada, y Marruecos ordenado atrás, y con mucho peligro en el contraataque.

    Los minutos se consumieron con Argentina siempre precipitada, nerviosa, muy individualista y muy dura, cometió decenas de faltas, y Marruecos sin fisuras en defensa, en un ejercicio de rigor que mantuvo todo el campeonato y que le ha permitido alzar por primera vez en su historia un título mundial, y convertirse en el segundo equipo africano en ganar un sub-20.