Etiqueta: Sanae Takaichi

  • China amplía maniobras y eleva amenazas sobre Japón en pleno deterioro de las relaciones

    China amplía maniobras y eleva amenazas sobre Japón en pleno deterioro de las relaciones

    China elevó este martes la presión política, diplomática y militar sobre Japón con nuevos reproches y una ampliación de sus maniobras con fuego real en el mar Amarillo, en medio de tensiones por las recientes declaraciones de la primera ministra nipona, Sanae Takaichi, sobre una posible intervención japonesa en un conflicto en torno a Taiwán.

    La Administración de Seguridad Marítima china anunció anoche la extensión de los ejercicios militares iniciados este lunes, que ahora se prolongarán hasta el 25 de noviembre y que implican la prohibición total de navegación entre las 08.00 y las 18.00 horas en una zona del sur del mar Amarillo.

    El aviso no detalla los medios implicados ni el propósito específico del ejercicio.

    Este nuevo comunicado sucede a otro emitido el día 15 para un área distinta en el sector central del mismo mar, donde los ejercicios comenzaron este lunes.

    Nuevas protestas

    Durante una ronda de consultas celebrada esta mañana en Pekín entre el director de Asuntos de Asia del Ministerio de Exteriores chino, Liu Jinsong, y el director de la Oficina de Asia y Oceanía nipona, Masaaki Kanai, China presentó nuevas protestas formales por las declaraciones de Takaichi.

    Según la Cancillería china, sus palabras «violaron gravemente» el derecho internacional, «socavaron el orden internacional de posguerra» y «dañaron de raíz» la base política de la relación bilateral, además de «provocar la indignación del pueblo chino».

    Tokio debe «retirar de inmediato sus declaraciones equivocadas» y «detener la creación de problemas en asuntos relacionados con China», dijo la portavoz Mao Ning, que exigió «acciones concretas» por parte de Japón para remediar la situación.

    El malestar chino también se proyectó sobre Estados Unidos. Mao calificó de «espectáculo político malintencionado» las declaraciones del embajador estadounidense en Japón, George Glass, quien reiteró el compromiso de Washington con la defensa de las disputadas islas Senkaku (conocidas como ‘Diaoyu’ en China) tras la reciente presencia de buques de la Guardia Costera china en dicha zona.

    Tokio intenta calmar los ánimos

    El aumento de la presión diplomática se produce mientras Tokio intenta frenar la escalada.

    Japón envió el lunes a Kanai a Pekín para transmitir que su postura sobre Taiwán no ha cambiado, aunque también para expresar su descontento por el comentario del cónsul chino en Osaka, posteriormente borrado, en el que instaba a «cortar la cabeza» de Takaichi.

    Japón reiteró hoy que está «abierto a cualquier tipo de diálogo bilateral» con China, incluso en el marco de la cumbre del G20 en Sudáfrica, aunque Pekín aseguró el lunes que el primer ministro, Li Qiang, «no tiene previsto reunirse con líderes japoneses» durante el evento.

    Pekín emitió la semana pasada avisos exhortando a sus ciudadanos a evitar viajar o estudiar en Japón, alegando delitos contra residentes chinos y un ambiente «hostil» alimentado, según China, por grupos derechistas nipones.

    Las advertencias derivaron en casi medio millón de cancelaciones de vuelos desde China hacia Japón y en pérdidas bursátiles para empresas japonesas relacionadas con el turismo y el comercio minorista.

    La dimensión cultural también se ha visto afectada. Dos películas japonesas, «Cells at Work!» y «Crayon Shin-chan: The Burning Kasukabe Dancers», pospusieron su estreno en el gigante asiático tras recibir notificaciones oficiales, informó la prensa este lunes.
    China sostiene que Taiwán es una «parte inalienable» de su territorio y no descarta el uso de la fuerza para lograr la reunificación.

    El aumento de las tensiones entre Pekín y Tokio se produce en coincidencia con el 80.º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, en el que China ha recordado su victoria contra la invasión nipona, durante la cual se registraron matanzas de civiles, experimentos con armas biológicas y el uso de mujeres chinas como esclavas sexuales por parte de oficiales del Ejército nipón.

    En los últimos meses, se han producido incidentes violentos en China contra ciudadanos japoneses.

    En junio de 2024, una mujer japonesa y su hija fueron apuñaladas en Suzhou (este), en un incidente en el que falleció una ciudadana china que intentó defenderlas, mientras que en septiembre de ese mismo año un niño japonés fue asesinado en Shenzhen (sureste).

  • Primera ministra de Japón advierte que ataque a Taiwán activaría respuesta militar

    Primera ministra de Japón advierte que ataque a Taiwán activaría respuesta militar

    La primera ministra de Japón, Sanae Takaichi, aseguró este lunes que una ofensiva militar china contra Taiwán colocaría a su país en una “situación de crisis” y podría justificar la intervención de sus Fuerzas de Autodefensa, en virtud del principio de autodefensa colectiva que contempla su legislación. Las declaraciones surgen tras recientes críticas del Gobierno chino por una reunión entre Takaichi y un alto funcionario taiwanés.

    Durante una sesión extraordinaria en la Cámara Baja del Parlamento japonés, Takaichi reafirmó su postura ante una posible escalada en el estrecho de Taiwán. “Dije el otro día que podría recurrir a la fuerza según la situación, pero el Gobierno tomará la decisión analizando todos los factores”, expresó en respuesta a preguntas parlamentarias sobre una hipotética intervención militar china.

    La mandataria advirtió que el “peor escenario posible” incluiría un bloqueo marítimo por parte de navíos de guerra chinos, lo que afectaría directamente la estabilidad y seguridad de Japón. En ese contexto, un ataque a Taiwán podría desencadenar una respuesta directa bajo el amparo de las reformas legales que amplían el alcance del concepto de autodefensa colectiva.

    Dichas reformas permiten a las Fuerzas de Autodefensa de Japón actuar en escenarios donde la supervivencia del país esté comprometida, a pesar de que su Constitución pacifista prohíbe la guerra como herramienta para resolver disputas internacionales. Las enmiendas se aprobaron para atender amenazas regionales crecientes en Asia-Pacífico.

    El portavoz del Gobierno japonés, Minoru Kihara, reforzó esa posición al señalar que “la paz y la estabilidad de Taiwán es importante para la seguridad de Japón y de la comunidad internacional”.

    También afirmó que la postura de Tokio “ha cambiado”, lo cual evidencia un viraje en la política exterior japonesa hacia una mayor firmeza frente a China.

    Las declaraciones de Takaichi surgen luego de que el Ministerio de Asuntos Exteriores chino condenara su reunión con el exviceprimer ministro y actual asesor presidencial de Taiwán, Lin Hsin-i, durante la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), celebrada en Corea del Sur.

    A pesar de haber reconocido a la República Popular China como el único gobierno legítimo desde 1972, Japón ha mantenido lazos no oficiales con Taiwán, respaldados por intereses económicos y de seguridad compartidos. En su momento, el fallecido primer ministro Shinzo Abe también advirtió que una invasión china a Taiwán requeriría una reacción por parte de Japón, en línea con sus alianzas internacionales.

    China considera a Taiwán una provincia rebelde desde 1949 y no ha descartado el uso de la fuerza para su reunificación. Por su parte, las autoridades taiwanesas sostienen que la isla mantiene una soberanía propia y que “la República de China y la República Popular China no están subordinadas entre sí”, según su posición oficial.

     

  • Trump realiza una visita a Japón llena de halagos pero sin grandes avances comerciales

    Trump realiza una visita a Japón llena de halagos pero sin grandes avances comerciales

    El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizó este martes una visita oficial a Japón llena de halagos mutuos con la recién nombrada primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, pero sin grandes avances en sus negociaciones comerciales.

    Durante la reunión entre ambos en el Palacio de Akasaka de Tokio, Takaichi, que la semana pasada hizo historia al convertirse en la primera mujer al frente del Gobierno japonés, alabó la labor de Trump en el alto el fuego entre Tailandia y Camboya, que se enfrentaron brevemente en la frontera el pasado julio, así como «el logro histórico sin precedentes» obtenido en Oriente Medio.

    La japonesa, de hecho, comunicó a Trump su intención de nominarlo para el Premio Nobel de la Paz, según dijo después la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.

    Takaichi también le regaló el palo de golf ‘putter’ de Shinzo Abe, el influyente exmandatario nipón, con quien el inquilino de la Casa Blanca entabló una buena amistad y que fue asesinado en 2022.

    La conservadora, apadrinada política de Abe, sacó a relucir en numerosas ocasiones su relación con el ex primer ministro para tratar de ganarse el favor de Trump, quien por su parte aventuró que al exmandatario «le alegraría mucho» saber de su ascenso al poder.

    Precisamente este martes se declaró culpable el japonés Tetsuya Yamagami del asesinato de Abe en el arranque de su juicio, más de tres años después del magnicidio que tuvo lugar durante un acto electoral en las calles del oeste nipón.

    Acuerdo de minerales y tierras raras

    Más allá de las muestras de afecto, los líderes firmaron este martes un acuerdo de cooperación en el sector de los minerales críticos y tierras raras enfocado en inversiones coordinadas para asegurar un suministro estable, en medio de las restricciones a las exportaciones impuestas por China.

    Según el pacto, Tokio y Washington colaborarán para identificar proyectos de interés común, sin detalles o localizaciones específicas, para abordar las deficiencias en las cadenas de suministro de estos materiales, esenciales para el desarrollo de la tecnología moderna.

    Ambas potencias se dan un plazo de seis meses para «adoptar medidas que brinden apoyo financiero a proyectos seleccionados con el objetivo de generar un producto final para su entrega a compradores en Estados Unidos y Japón y, según corresponda, países con ideas afines», de acuerdo con la Casa Blanca.

    Takaichi y Trump firmaron también otro documento -bajo el lema de hacia una «era dorada» en sus relaciones- en el que se comprometieron a implementar el acuerdo comercial que alcanzaron en julio, que fijó los aranceles recíprocos de Washington en el 15 % y dentro del cual aún está por conocerse el destino de los 550,000 millones de dólares que Tokio se comprometió a invertir en EE.UU.

    A lo largo del día, sin embargo, no hubo menciones al desembolso prometido, sobre el que la propia Takaichi ha expresado dudas.

    El estadounidense sí agradeció a Japón sus «grandes inversiones» tras anunciar que la compañía de automóviles Toyota invertirá más de 10.000 millones de dólares en construir plantas de fabricación en Estados Unidos, un anuncio que la firma japonesa todavía no ha confirmado.

    Cooperación en defensa

    Trump consiguió que la mandataria se comprometiera a reforzar «fundamentalmente» sus capacidades defensivas, según dijo la propia Takaichi durante un discurso a las tropas estadounidenses en la base naval de Yokosuka, junto a la bahía de Tokio.

    La conservadora ya había anunciado, durante su primer discurso ante el Parlamento tras ser elegida primera ministra, su intención de adelantar dos años los planes del archipiélago de elevar el gasto en defensa al 2 % del Producto Interior Bruto (PIB), algo que prevé lograr antes de que acabe el presente año fiscal, en marzo de 2026.

    El presidente estadounidense, de hecho, dijo que esta semana llegaría a Japón un primer cargamento de misiles para los cazas F-35 de las Fuerzas de Autodefensa (Ejército).

    Está previsto que Trump vuele mañana por la mañana a Corea del Sur, donde culminará una gira por Asia que comenzó el domingo en Malasia y cuyo colofón será su esperada reunión con el presidente chino, Xi Jinping, en los márgenes de la cumbre de la APEC.

    Ambos mandatarios tienen previsto reunirse el 30 de octubre en la ciudad portuaria surcoreana de Busan (320 kilómetros al sureste de Seúl), después de que las delegaciones de ambas potencias alcanzaran el domingo un «acuerdo preliminar» para un pacto comercial.

  • Trump y primera ministra de Japón anuncian “nueva era dorada” en su alianza

    Trump y primera ministra de Japón anuncian “nueva era dorada” en su alianza

    La primera ministra de Japón, Sanae Takaichi, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmaron este martes su compromiso de fortalecer la alianza entre ambos países, durante su primer encuentro oficial celebrado en Tokio.

    “Me gustaría lograr una nueva era dorada de la alianza entre Japón y Estados Unidos en la que ambos se vuelvan más fuertes y también más prósperos”, declaró Takaichi desde el Palacio de invitados de Estado de Akasaka, en la capital japonesa, donde recibió por primera vez al mandatario estadounidense tras asumir el cargo hace una semana.

    El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien llegó a Tokio el lunes tras visitar Malasia, felicitó a la nueva jefa de Gobierno y expresó su entusiasmo por este nuevo capítulo en la relación bilateral.

    “Creo que vamos a lograr un comercio enorme juntos, más que nunca, solamente con firmar un nuevo acuerdo, un acuerdo muy justo”, afirmó el mandatario estadounidense.

    Trump destacó además que Japón ha solicitado una nueva compra de equipo militar estadounidense. “Saben que fabricamos el mejor equipo militar del mundo: los aviones a reacción, los misiles y todo lo demás, y esperamos no tener que usarlos mucho, o incluso nunca. Pero agradecemos ese pedido y el comercio”, añadió.

    El mandatario norteamericano afirmó que prevé una “fantástica relación” con la nueva líder japonesa y reafirmó su admiración por el país asiático: “Puedo afirmar que esta relación será más sólida que nunca”, dijo. También ofreció su respaldo incondicional a Tokio: “Si tienen alguna pregunta, duda, cualquier cosa que deseen, cualquier favor que necesiten, cualquier cosa que pueda hacer para ayudar a Japón, ahí estaremos”.

    Durante la reunión, Takaichi elogió el rol de Trump en la mediación del alto al fuego entre Tailandia y Camboya, así como su “logro histórico sin precedentes” en Oriente Medio.

    “El primer ministro Abe me habló con frecuencia de su diplomacia dinámica”, recordó la primera ministra, aludiendo a la amistad que el fallecido Shinzo Abe sostuvo con el presidente estadounidense, quien dijo sentirse “entristecido” por su asesinato.

    Tras las declaraciones ante la prensa, ambas partes sostuvieron una reunión privada, que concluyó con la firma de dos acuerdos: uno sobre el plan estratégico de cooperación para la nueva “época dorada” entre Japón y Estados Unidos y otro relacionado con la provisión conjunta de tierras raras y minerales críticos.

     

  • Sanae Takaichi es elegida como la primera mujer en liderar Japón

    Sanae Takaichi es elegida como la primera mujer en liderar Japón

    La conservadora Sanae Takaichi, del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), fue elegida este martes como la primera mujer en ocupar el cargo de primera ministra de Japón, tras imponerse en la votación parlamentaria celebrada en la Dieta, el Parlamento nacional.

    Takaichi, de 64 años, obtuvo 237 votos en la Cámara Baja, superando por cuatro sufragios el mínimo necesario. El portavoz de la Cámara, Fukushiro Nukaga, oficializó el resultado que fue celebrado con júbilo por su bancada. En segundo lugar quedó Yoshihiko Noda, del Partido Democrático Constitucional (PDC), con 149 votos; seguido por Yuichiro Tamaki, del Partido Democrático para el Pueblo (PDP), con 28; y Tetsuo Saito, del budista Komeito, que obtuvo 24 votos tras abandonar la coalición con el PLD.

    La victoria se ratificó posteriormente en la Cámara Alta, donde Takaichi derrotó a Noda por 125 votos frente a 46, confirmando así su investidura como jefa de Gobierno.

    Su llegada al poder se consolidó tras alcanzar un pacto con el Partido de la Innovación de Japón (Ishin), nuevo aliado de coalición, con el que obtuvo el respaldo necesario para imponerse en ambas cámaras ante una oposición dividida.

    “Desde que Komeito se retiró, hemos explorado la posibilidad de un nuevo marco de coalición con partidos con políticas cercanas. Ahora tomaremos medidas económicas para responder a la esperanza del pueblo de abordar la subida de precios”, declaró Shunichi Suzuki, secretario general del PLD y número dos de la formación.

    Suzuki reconoció que el nuevo Gabinete deberá actuar con rapidez para atender temas económicos y diplomáticos, y anticipó que se buscará el diálogo con otras fuerzas políticas ante la condición de Gobierno en minoría. “Nos esforzaremos en buscar consenso y apoyo”, afirmó.

    La elección de Takaichi se produce tras la dimisión de Shigeru Ishiba, quien dejó el cargo en septiembre luego de que su coalición perdiera la mayoría parlamentaria en ambas cámaras. Ishiba, que estuvo poco más de un año en el poder, fue sustituido tras unas primarias internas del PLD celebradas el 4 de octubre, en las que Takaichi resultó vencedora en segunda ronda.

    La nueva primera ministra es considerada una figura del ala más conservadora del partido y se convierte en un hito histórico para Japón, al romper con una larga tradición de liderazgos masculinos en la política nacional.

     

  • La conservadora Sanae Takaichi se perfila como la primera mujer en liderar Japón

    La conservadora Sanae Takaichi se perfila como la primera mujer en liderar Japón

    Japón podría estar a punto de tener por primera vez a una mujer al frente del Gobierno. La ultraconservadora Sanae Takaichi, de 64 años, se convirtió el sábado en la nueva líder del Partido Liberal Democrático (PLD), formación en el poder, y cuenta con todas las posibilidades de ser confirmada como primera ministra en la sesión extraordinaria del Parlamento prevista para mediados de octubre.

    Takaichi, fiel discípula del fallecido Shinzo Abe y admiradora de la británica Margaret Thatcher, derrotó en segunda vuelta al ministro de Agricultura, Shinjiro Koizumi, por 185 votos contra 156. En su primer mensaje tras la victoria, dejó clara su filosofía: “Trabajaré, trabajaré, trabajaré, trabajaré, trabajaré”, declaró ante los medios en Tokio.

    Considerada una de las figuras más influyentes del ala derechista del PLD, Takaichi promete continuar la línea económica de su mentor, Abe, con una política de estímulos fiscales y monetarios para impulsar el crecimiento. También ha defendido que el Banco de Japón mantenga una política monetaria expansiva y evite subir los tipos de interés, una postura que, según analistas, podría debilitar el yen y favorecer a los mercados bursátiles.

    En el plano político, Takaichi aboga por reformar la Constitución para reforzar las capacidades del Ejército japonés, postura que podría tensar las relaciones con China. La líder, que se ha declarado devota del santuario Yasukuni, símbolo del militarismo nipón, adelantó que continuará visitándolo pese a las críticas internacionales.

    Desafíos políticos y de coalición

    Takaichi llega al liderazgo del PLD tras una cadena de derrotas electorales que forzaron la renuncia del primer ministro Shigeru Ishiba. Su principal reto será restaurar la confianza pública y reconectar con una generación joven que se inclina por partidos populistas ante la crisis del costo de vida.

    La dirigente necesitará además el respaldo del partido Komeito, socio de coalición del PLD, para ser confirmada como jefa de Gobierno. Sin embargo, el partido centrista ha advertido que podría revisar su alianza si Takaichi no modera algunas de sus posturas más radicales.

    “Komeito podría abandonar la coalición si Takaichi no suaviza su discurso, especialmente sobre las visitas al santuario Yasukuni”, señaló el profesor Jeffrey J. Hall, especialista en estudios japoneses de la Universidad de Kanda, en declaraciones a EFE.

    Un gabinete en construcción

    Takaichi dedicó el domingo a evaluar los primeros nombramientos dentro del PLD, con el propósito de “crear un partido donde todos participen”. No descartó incluir en su equipo a algunos de sus rivales internos.

    “He escuchado sus opiniones y todos tienen buenas ideas”, aseguró.

    Entre sus apoyos clave se encuentra el grupo de legisladores leales al ex primer ministro Taro Aso, cuya influencia resultó determinante en su victoria. Se espera que algunos de sus miembros asuman puestos estratégicos en el nuevo gabinete.

    Si el Parlamento confirma su elección, Sanae Takaichi no solo romperá un techo histórico en la política japonesa, sino que imprimirá un giro conservador al Gobierno del país con una mezcla de disciplina económica, nacionalismo y liderazgo férreo al estilo Thatcher.