El obispo nicaragüense Silvio Báez, actualmente exiliado en Estados Unidos, denunció el domingo que el régimen de Nicaragua, liderado por los esposos Daniel Ortega y Rosario Murillo, ha perfeccionado lo que describió como “el antiguo método de Herodes”, al forzar al exilio a miles de personas y negar el ingreso a su propio país a otros cientos.
“La dictadura ha afinado diabólicamente el antiguo método de Herodes. No se limitan a forzar al exilio a ciudadanos honestos e inocentes, sino que también les prohíben el ingreso a su propio país, les confiscan sus bienes y amenazan y hostigan a sus familiares”, expresó Báez durante una homilía desde una iglesia en Miami.
El obispo, quien dejó Nicaragua en 2019 por instrucciones del papa Francisco debido a riesgos contra su seguridad, afirmó que el gobierno sandinista no se conforma con desterrar a sus críticos, sino que también sigue vigilando y persiguiendo a quienes ya se encuentran en el exilio.
“Espían a los exiliados, les niegan los servicios consulares o dejan a miles de personas en la grave condición de apátridas de hecho al no renovarles el pasaporte. Incluso a muchos nos han privado intencional y arbitrariamente de nuestra nacionalidad, como parte de un plan sistemático de represión institucionalizada”, advirtió.
Durante su mensaje, Báez destacó que el exilio, pese a sus desafíos, puede convertirse en una experiencia de transformación espiritual. “Jesús quiso pertenecer a una familia que experimentó el exilio, para que ningún exiliado se sienta excluido de la cercanía y la protección amorosa de Dios”, manifestó. También llamó a los migrantes a mantener su dignidad, respetar las leyes del país que los acoge y trabajar con honestidad y solidaridad.
En su homilía, el prelado también señaló a las dictaduras de Cuba y Venezuela, aliados del gobierno de Ortega, por haber obligado al exilio a miles de sus ciudadanos.
“Los Herodes de hoy, llenos de soberbia, intolerantes y sanguinarios, se sienten dueños de nuestros países y obligan al exilio miles de personas exponiéndolos a toda clase de riesgos, humillaciones y peligros en tierras extranjeras”, concluyó.
