El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció el miércoles nuevas sanciones contra las dos mayores petroleras de Rusia, Rosneft y Lukoil, por su papel en el financiamiento de la ofensiva militar del Kremlin en Ucrania, y como respuesta directa a lo que Washington calificó como la “falta de compromiso serio” de Rusia con un proceso de paz.
“Dada la negativa del presidente Putin a poner fin a esta guerra sin sentido, el Tesoro está sancionando a las dos mayores empresas petroleras de Rusia que financian la maquinaria bélica del Kremlin”, expresó el secretario del Tesoro, Scott Bessent, en un comunicado oficial.
Las sanciones, anunciadas desde la Casa Blanca, buscan debilitar la capacidad operativa del gobierno ruso para continuar con la guerra en Ucrania. Además, se enmarcan en la estrategia de Estados Unidos de presionar económicamente al círculo cercano al poder ruso. “El Tesoro está dispuesto a tomar nuevas medidas si es necesario para apoyar los esfuerzos del presidente Trump por poner fin a otra guerra más. Animamos a nuestros aliados a que se unan a nosotros y se adhieran a estas sanciones”, advirtió Bessent.
Rosneft, empresa estatal que representa aproximadamente el 6 % de la producción global de crudo y cerca del 50 % de la producción rusa, junto con Lukoil, exporta alrededor de 3.1 millones de barriles diarios. Ambas compañías ya habían sido sancionadas anteriormente, pero esta nueva medida amplía el alcance a sus filiales y empresas vinculadas donde tengan más del 50 % de participación, directa o indirectamente.
La sanción incluye el congelamiento de bienes e intereses en Estados Unidos, prohíbe cualquier tipo de transacción con personas o compañías estadounidenses y bloquea el acceso de ambas petroleras al sistema financiero de ese país.
El martes, la Casa Blanca aclaró que no hay “planes inmediatos” para un nuevo encuentro entre el presidente de Estados Unidos y el mandatario ruso, pese a que el presidente Trump indicó recientemente que ese diálogo podría ocurrir “en un corto plazo”.
Desde febrero de 2022, cuando inició la invasión rusa a Ucrania, Estados Unidos ha sancionado a más de 6,000 individuos y entidades relacionadas con el aparato militar ruso. Las acciones han sido reforzadas a medida que Moscú intensifica sus ataques y se profundiza el conflicto.

