The New York Times se niega a dejar de publicar información no autorizada por el Pentágono

The New York Times rechazó este viernes firmar una política del Departamento de Guerra de Estados Unidos —antes conocido como Departamento de Defensa— que condiciona el acceso de la prensa a sus instalaciones a cambio de no publicar información no autorizada.

“Los periodistas de The New York Times no firmarán la política revisada del Pentágono sobre acreditaciones de prensa, que amenaza con castigarlos por la recopilación habitual de noticias protegida por la Primera Enmienda”, afirmó Richard Stevenson, jefe de la corresponsalía del diario en Washington.

La normativa, anunciada en septiembre por el Pentágono, establece que los reporteros deberán comprometerse a no divulgar documentos o datos considerados sensibles, incluso si estos no están oficialmente clasificados como secretos. Según explicó el portavoz del organismo, Sean Parnell, la medida entraría en vigor en un plazo de dos a tres semanas y se aplicaría a todos los medios que cubren las actividades militares desde sus instalaciones.

Stevenson expresó la preocupación del periódico sobre este cambio, al considerar que restringe el trabajo periodístico en torno al Ejército estadounidense, una institución financiada con casi $1 billón anuales provenientes de los contribuyentes. “El público tiene derecho a saber cómo funcionan el Gobierno y el Ejército”, subrayó.

El editor recalcó que The New York Times mantiene su compromiso con una cobertura “profunda y justa”, guiada por una “búsqueda inquebrantable de los hechos” en defensa del interés público.

La tensión entre el Pentágono y la prensa aumentó desde mayo, cuando el secretario de Guerra, Pete Hegseth, limitó aún más el acceso a instalaciones militares en medio de una crisis provocada por la filtración de ataques estadounidenses en Yemen, divulgada en un grupo privado de Signal.