Más de 2,200 vuelos fueron cancelados este domingo en Estados Unidos debido a la escasez de controladores aéreos causada por el prolongado cierre del Gobierno federal, que este día alcanzó los 40 días de duración.
Según el portal especializado FlightAware, hasta la noche del domingo se reportaban 2,225 vuelos cancelados y al menos 7,522 con retrasos, en una jornada marcada por la crisis operativa en los principales aeropuertos del país.
Los terminales más afectados fueron los de Atlanta, Newark, LaGuardia y el Aeropuerto Internacional de Chicago. Las aerolíneas con mayor número de incidentes fueron Delta, SkyWest, Republic y American Airlines.
La cadena CNN informó que al menos quince centros de control de tráfico aéreo en todo el país confirmaron una disminución significativa de personal, principalmente en regiones clave como Nueva York, Washington D.C., Atlanta, Nashville, Dallas y Chicago.
Ante esta situación, el Departamento de Transporte ordenó una reducción del 10 % en el tráfico aéreo a nivel nacional, con la advertencia de que esta cifra podría elevarse al 20 % si no se logra una solución antes de la próxima semana, especialmente con la cercanía del fin de semana de Acción de Gracias, una de las fechas con mayor movilidad aérea del año.
El secretario de Transportes, Sean Duffy, advirtió este domingo que “la situación puede empeorar” si no se restablecen los fondos para el pago del personal. Según Duffy, el número de controladores que se reportan de baja continúa en aumento, superando ya los 2,000, a pesar de ser trabajadores esenciales llamados a laborar sin recibir su salario durante el cierre.
Además, señaló que el próximo martes está programado un nuevo pago que no podrá realizarse si el Congreso no pone fin al cierre gubernamental. El Senado ha mantenido sesiones durante todo el fin de semana en un intento por llegar a un acuerdo que desbloquee los fondos federales.
Este episodio representa el cierre más largo en la historia del país y ya ha generado un impacto directo en la movilidad aérea nacional, afectando a miles de pasajeros y alterando las operaciones en los principales centros de conexión aérea.
