Reporteros Sin Fronteras pidió al gobierno de Estados Unidos que «libere inmediatamente» al periodista salvadoreño Mario Guevara, quien fue detenido el 14 de junio mientras transmitía en vivo una protesta contra las redadas de migrantes.
El director ejecutivo de Reporteros Sin Fronteras de Estados Unidos, Clayton Weimers, pidió al gobierno estadounidense que libere a Guevara, que ha cumplido 100 días arrestado, y que emita una disculpa por lo que considera «su detención ilegal».
A través de un comunicado, recordó que Guevara sigue detenido y que desde su arresto hasta la batalla legal que ha conlleva, alertan sobre «un nuevo y peligroso giro en la represión» de la administración del presidente Donald Trump que implica deportar «periodistas internacionales por su trabajo».
«Reporteros Sin Fronteras (RSF) pide al Gobierno estadounidense que libere inmediatamente a Guevara y se disculpe por su detención ilegal… Su arresto y la batalla legal que desencadenó, y que sigue en curso, marcan un nuevo y peligroso giro en la represión de la Administración Trump contra los medios: la deportación de periodistas internacionales por su trabajo». Reporteros Sin Fronteras.
Además, agregó que si bien las «detenciones improcedentes» de periodistas que cubren protestas en Estados Unidos «son muy frecuentes», estos usualmente «son liberados rápidamente», sin embargo, Guevara ya cumplió tres meses en detención, acusado de los delito de reunión ilegal, obstrucción y por ubicarse como peatón en la calzada.
Por ello, el director ejecutivo de Reporteros Sin Fronteras de Estados Unidos, Clayton Weimers, aseguró que el caso de Mario Guevara no se trata de «un asunto de inmigración cualquiera» porque «fue detenido por su labor periodística».
En ese sentido, Weimers asevera que particularmente el caso de Guevara «envía un escalofriante mensaje de intimidación» para la prensa internacional que trabaja en «Estados Unidos: no se metan en nuestros asuntos o serán los siguientes».
Además, la organización recordó que en agosto enviaron también una carta al Departamento de Seguridad Nacional, que supervisa al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), para pedir su liberación.