La selección de Haití selló este martes su clasificación al Mundial de 2026 al vencer 2-0 a Nicaragua, en partido disputado en Curazao, correspondiente a la última jornada del Grupo C de las eliminatorias de la Concacaf.
Bajo la dirección del técnico francés Sébastien Migné, el conjunto caribeño logró su segunda clasificación a una Copa del Mundo, tras su única participación en Alemania 1974, donde fue eliminado en fase de grupos.
Louicius Deedson abrió el marcador al minuto 9 y Ruben Providence sentenció el duelo al 45, asegurando así el liderato del grupo con 11 puntos, por encima de selecciones favoritas como Honduras (9) y Costa Rica (7), que empataron entre sí. Nicaragua, dirigida por el chileno Marco Antonio «el Fantasma» Figueroa, cerró su participación con solo 4 unidades.
El triunfo de Haití, considerado una “batalla decisiva” por la Federación Haitiana de Fútbol (FHF), coincide con el 222 aniversario de la Batalla de Vertières, que selló la independencia del país respecto a Francia. La clasificación representa un hito para una nación que, pese a estar sumida en una severa crisis, encontró en el fútbol una razón para celebrar.
Debido a la inseguridad que atraviesa el país, Haití disputó todos sus partidos como local fuera de su territorio. El encuentro ante Nicaragua se jugó en el estadio Ergilio Hato, en Curazao, ya que el Stade Sylvio Cator, principal escenario deportivo haitiano, permanece abandonado y bajo control de grupos armados desde febrero de 2024. Actualmente, al menos el 90 % de la región metropolitana de Puerto Príncipe está en manos de pandillas.
A pesar del caos, el fútbol sigue siendo un símbolo de unidad nacional. La clasificación al Mundial de 2026, que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá, representa una luz de esperanza para un pueblo que lleva años enfrentando la adversidad.