La chef salvadoreña Karla Maricela Cornejo González, originaria de Caluco, Sonsonate, se proyecta como una figura prometedora en el ámbito culinario, gracias a una sólida formación y una experiencia laboral que abarca tanto el sector local como el internacional. Su trayectoria reciente incluye un destacado puesto como chef ejecutiva en Gauchos Grill Downey California.
Formación y habilidades clave
Karla Cornejo ha complementado su experiencia práctica con una formación continua en prestigiosas instituciones. En 2017, se tituló como Cocinero Profesional en la Academia Panamericana de Arte Culinario (APAC), donde también cursó la carrera de Administración de Restaurantes en 2022. Su interés por la especialización la llevó a completar el programa de la Escuela Culinaria de la Fundación Gente Ayudando Gente (GAG) y a formarse como Barista Profesional en Finca Noruega Apaneca en 2023.
Con experiencia previa como Chef Instructora en Chef for the World y coordinadora de eventos en Casa La Novena, Karla Cornejo demuestra una versatilidad que le permite adaptarse a diferentes roles dentro de la industria gastronómica.
El ascenso profesional de esta joven chef salvadoreña es un ejemplo del talento local que, con dedicación y formación, está logrando destacar en escenarios culinarios de alcance global.
De Caluco a California: elevando la gastronomía salvadoreña

A sus 27 años, la chef ha logrado llevar el sabor de su tierra natal hasta las cocinas de California. Inicialmente contratada por el restaurante argentino, su talento y precisión técnica impresionaron a la gerencia, que le solicitó incorporar elementos de la gastronomía salvadoreña en los platillos.
“Traje mi talento, mi sabor, mi país”, afirma Cornejo, destacando el orgullo que siente por su herencia.
La chef, que en 2017 fundó el Kali Restaurante y Comedor Típico en su natal Caluco, se ha convertido en una embajadora de la cocina salvadoreña, transformando ingredientes tradicionales en creaciones innovadoras. Entre sus platos destacan tamales de maíz rellenos de camarón estilo soufflé y crepas de frijole con tempura de flor de ayote.
El sueño a largo plazo de Karla es regresar a El Salvador para abrir un restaurante de mayor envergadura, aplicando todo lo aprendido en el extranjero para continuar elevando la gastronomía nacional. “Quiero innovar, seguir aprendiendo nuevas técnicas, absorber todo el conocimiento que pueda de chefs con más experiencia y luego regresar a mi país con un proyecto más ambicioso”, puntualiza.
Se describe a sí misma como disciplinada, humilde y trabajadora, y espera inspirar a otros que sueñan con transformar sus vidas a través de la cocina.
“Mi mensaje para los salvadoreños es que perseveren, que luchen, que sigan sus sueños, porque con disciplina, perseverancia y trabajo duro, todo es posible. No soy la única que puede hacerlo, todos tenemos la capacidad de lograrlo”, concluye.