La Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) de 2024, reveló que más de 2,800 adolescentes abandonaron sus estudios el año anterior, debido a embarazos.
La encuesta elaborada por el Banco Central de Reserva (BCR), expone que 2,495,497 niñas y adolescentes no asistieron a clases durante el año 2024, y de estos 2,826 casos se debió a embarazos.
El embarazo aparece como una de 18 causas que provocan la deserción estudiantil entre las mujeres jóvenes, según el informe del BCR, entre ellos enfermedad, falta de acceso a centros educativos y causas del hogar.
En total, la encuesta reportó que 4,539,605 niños, niñas y adolescentes abandonaron sus estudios el año anterior y dentro de ese grupo el 54 % corresponde a mujeres. Dicho porcentaje muestra que la población femenina tiene mayores dificultades para mantenerse en el sistema educativo y culminar sus estudios.
Nivel de pobreza
La EHPM tambien profundiza en las condiciones económicas de las jóvenes que enfrentan un embarazo precoz. Del total de adolescentes embarazadas 1,227 vivían en situación de pobreza, 508 en pobreza extrema y 619 en una pobreza relativa. En contraste, en 1,699 de los embarazos no fueron considerados como situación de pobreza.
Además de las jóvenes que abandonaron sus estudios por embarazo, la encuesta señala que 7,738 no asistieron a clases por encontrarse en periodo de maternidad, lo que sugiere que las jóvenes no logran incorporarse a la escuela después del parto.
Otro de los motivos relevantes de abandono escolar figura «quehaceres domésticos», y según los datos, en 2024, un total de 518,794 personas dejaron de estudiar por dedicarse los quehaceres del hogar, tarea que recae en la mayoría de los casos en la población femenina.
Los datos del BCR registró hasta 2024 una población de 2,963,137 mujeres de 10 años en adelante, entre las cuales 862,333 son jefas del hogar.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas para la salud sexual y reproductiva (UNFPA) informó que, El Salvador registró para el año 2024, un total de 7,900 embarazos de niñas y adolescentes entre los 10 y 19 años, que equivale a un promedio de 21 casos por día.