Un grupo de niños de Nuestros Pequeños Hermanos en El Salvador cambió al ahora obispo de Nueva York

Cuando un grupo de niños salvadoreños del hogar Nuestros Pequeños Hermanos se le acercó al entonces padre Ron y le reclamaron por haberlos hecho esperar mientras hacía el trabajo administrativo, el ahora obispo de Nueva York cambió: «Eres más como un abogado que un sacerdote», fue aquel reclamo del grupo de niños al prelado.

Esta anécdota fue contada por el mismo obispo Ronald Hicks en la misa de instalación como obispo de Joliet, en Illinois, en el año 2020. «Sus palabras me rompieron el corazón», dijo el sacerdote, según cita un artículo de National Catholic Reporter, el cual, relata bajo la voz de quienes convivieron con él cómo fue su paso por El Salvador.

La directora de programas de organización de Nuestros Pequeños Hermanos (NPH), Brenda Méndez, recordó al padre Ron como un salvadoreño más, que disfrutaba recoger a todos los niños en las calles de Texistepeque.

«Él era como nosotros, comió pupusas como nosotros y nunca pareció una persona que vino de otro país…No queríamos que se fuera y le dijimos: ‘Pídeles que te dejen quedarse unos años más», relata el texto de National Catholic Reporter. A esto el ahora obispo respondió que debía ir donde Dios quería que fuera.

Ayer, el papa León XIV nombró al obispo Ronald Hicks como el nuevo encargado de la diocésis de Nueva York.

Monseñor Hicks llega a la diocésis de Nueva York, a segunda más grande de Estados Unidos, para suceder al cardenal Tomothy Dolan quien cumplió 75 años en febrero reciente. Dolan, aunque cercano al presidente estadounidense, Donald Trump, cuestionó las políticas migratorias desplegadas por el mandatario para impedir la llegada de migrantes.

De 58 años, es originario de Chicago. Es señalado como un prelado «tradicional» y de lado hacia los hispanos, los perdidos y pobres. Habla un español fluido y esperan que su experiencia en El Salvador sea valiosa en su nueva relación con los hispanos en Nueva York.

Según infocatólica, en 2015 fue nombrado vicario general arquidiocesano en Chicago y tres años más tarde, obispo auxiliar de esa misma diocésis natal.

Tras su partida de El Salvador, Hicks mantuvo el vínculo con NPH, aunque ahora menos por sus labores y responsabilidades, su pasó por el pulgarcito de América le dejó una huella, tanto así que su escudo episcopal lleva una rama de romero, en honor al obispo mártir salvadoreño, San Óscar Romero, de quién es seguidor.

Escudo de armas del obispo Ronald Hicks. Una ramita de romero al centro simboliza su lazo con el pueblo salvadoreño a través de monseñor Romero.