La educación y sus fines

Los fines de la educación son: educar, instruir, enseñar valores y el amor a la vida. Además, esos fines son variados y complejos de analizar cuando es aplicado a extractos sociales vulnerables o con precariedades económicas.

La educación ha tenido muchas connotaciones: enseñar a cultivar valores, culturas, tener conocimientos para acoplarse al status quo de una sociedad o para competir y saber quién es el mejor. De este modo, el ser humano debería de formarse para ser una persona de bien y no solo reflexionar que con la educación puede convertirse en un ser sin valores.

Los fines educativos están escritos; pero, aún no se logran aplicar en la escuela salvadoreña. La educación sigue siendo un paradigma a vencer. Las estadísticas muestran que no todos los estudiantes terminan la escuela, hay deserciones en diferentes niveles. El bajo grado de escolaridad hace que los salvadoreños no tengan las mismas oportunidades de aquellas personas que terminaron bachillerato o una carrera universitaria.

Por lo tanto, para poder eliminar las desigualdades se necesita: incorporar un currículo educativo que sea equitativo. La educación debe ser un pilar para garantizar una sociedad más justa y democrática. “Para Vasconcelos la educación es un proceso subsidiario, intencional y directo en el cual el educador acompaña y encamina al educando para influir en él, ´de suerte que cada educando consume dentro de sí la máxima potencialidad de su naturaleza´”. Por ende, los docentes deben ser una inspiración para que los discentes puedan tener los conocimientos necesarios y útiles para triunfar.

En 2012, León presentó “La esencia de la educación es educar, formar, liberar, ordenar, disciplinar. La buena educación forma al niño, a la niña, al joven y a la joven para el desarrollo y construcción del ser humano agradable, inteligente, productivo, libre, firme, sabio”.

Macías (2021) afirma “el proceso educativo, de acuerdo con el pensamiento pedagógico de Vasconcelos, es causado por factores internos, pero también externos, y combina las virtualidades de la autoeducación y de la heteroeducación, incluye las connotaciones de las dos raíces latinas del término educar: educere (sacar de, extraer de…) y educare (guiar, llevar, conducir, orientar…)”. Lo anterior hace repensar que el ser humano debe ser guiado y conducido hacia los saberes, hacia los aprendizajes que la vida misma nos trae. La educación debe ser una manera de orientar a los seres humanos para que encuentre el bien y la semilla del saber.

Es importante que en todos los niveles educativos se restructure el currículo para que enseñen: valores, urbanidad y toda ciencia que ayude a ser un mejor ser humano. Por ende, el ser humano educado es probable que no le falla a la sociedad, al Estado, a su familia y se distinguirá entre el bien y el mal. Una persona con estudios formales, logra salir adelante en la vida con menos dificultades. Los fines de la educación, según lo expuesto, es: formar, disciplinar, educar, sensibilizar y guiar al ser humano a que enfrente al mundo y todas las vicisitudes. Un ser humano con bases sólidas en educación logra entrar en todos los estamentos de la sociedad, no se deja engañar y contribuye, a través de su conocimiento, a transformar un mundo con mejores posibilidades, a que los derechos humanos se apliquen igualmente. Una persona educada tendrá la oportunidad de aplicar la ciencia para el bien de la sociedad.

La educación tiene que tener fines motivadores, a no ser un sistema educativo con dogmas políticos. Toda persona debe ser libre para pensar por sí solo. Si tuvo la oportunidad de educarse, que sean esos aprendizajes para realizar una reconstrucción de un sistema que enseñe a valorar más la vida, a que no se fomente que se llega a la escuela con el fin de aprender habilidades y destrezas para luego pasar en una organización si fomentar el talento humano. La educación debe de  enseñar a pensar al ser humano, a liberarse de todo lo que le impida desarrollarse y dejar una sociedad con valores.

*Fidel López Eguizábal es docente e investigador Universidad Nueva San Salvador 

fidel.flopez@mail.unssa.edu.sv