Etiqueta: deportaciones

  • Informe revela que 44 % de migrantes deportados en Arizona vivían en EE.UU. por más de una década

    Informe revela que 44 % de migrantes deportados en Arizona vivían en EE.UU. por más de una década

    Más del 44 % de los migrantes deportados por la frontera de Arizona en los últimos tres meses habían residido en los Estados Unidos por más de diez años, reveló un informe de la organización binacional Iniciativa Kino para la Frontera.

    El reporte, titulado “Ni siquiera me dejaron decir adiós”, se elaboró con base en una encuesta a 278 migrantes expulsados entre mayo y julio. De ellos, un 85 % eran hombres, y al menos un 40 % afirmó haber dejado a un familiar cercano en EE.UU., entre ellos esposas, hijos o padres.

    La investigación detalla que una de cada dos deportaciones fue consecuencia de operativos callejeros o procesos en cortes de Inmigración, encabezados por agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE). Varios encuestados denunciaron malos tratos y traslados por múltiples centros de detención antes de ser enviados a la frontera.

    Otro 33 % de los casos se originó en detenciones de tránsito, producto de la colaboración entre agencias locales y ICE. El 60 % de los arrestos ocurrieron en Arizona, mientras que el resto provinieron de estados como California, Florida, Nevada, Oregón, Texas y Washington.

    El informe resalta que un 8 % de los deportados llevaban más de 30 años viviendo en Estados Unidos, lo que refleja la magnitud del impacto en familias consolidadas durante décadas.

    La organización denunció que las políticas del presidente Donald Trump han incrementado las redadas y detenciones masivas de migrantes desde su regreso a la Casa Blanca en enero. Según cifras oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), en mayo pasado se registró un promedio de 3,800 detenciones diarias en la frontera.

    Con este panorama, la Iniciativa Kino advirtió que las medidas actuales profundizan la crisis humanitaria en la frontera de Arizona, dejando a miles de familias divididas y vulnerables.

  • Mascotas abandonadas por migrantes deportados agravan crisis de refugios animales en EEUU

    Mascotas abandonadas por migrantes deportados agravan crisis de refugios animales en EEUU

    Las deportaciones en Estados Unidos están agravando la crisis de los refugios de animales, especialmente en Florida, donde albergues saturados denuncian la llegada de decenas de perros, gatos y aves que quedan abandonados tras la expulsión de sus dueños.

    Un ejemplo es Adopt and Save a Life Rescue Mission, en el oeste de Miami, que en los últimos meses ha recibido al menos 19 perros y gatos de familias deportadas, además de gallos y otras aves. La directora, Daymi Blain, explicó a EFE que la situación es crítica:
    “Son reportes todos los días, miles de llamadas. Ya no puedo recibirlos, los posteo en redes sociales para ver si otros refugios pueden ayudar”, relató.

    El albergue mantiene más de 50 perros y 30 gatos, además de decenas en camino, y ha debido acondicionar un establo y tres casas rodantes para alojarlos, con un gasto mensual de $1,200 en electricidad.

    Deportaciones récord bajo Trump

    El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que en los primeros 200 días del Gobierno de Donald Trump fueron arrestados 352,000 inmigrantes indocumentados y deportados 324,000, un promedio de 1,620 al día.

    El impacto ya se siente en refugios de Broward, Tampa, Texas, Nueva York, Nueva Jersey, Tennessee y California, donde crece el temor de que la crisis se intensifique.

    En Los Ángeles, por ejemplo, agentes migratorios detuvieron la semana pasada a un joven chileno de 18 años mientras paseaba a su perro. La familia halló al animal abandonado tras el arresto.

    Organizaciones buscan soluciones

    En California, la organización C.A.R.E.4Paws prepara el lanzamiento de un refugio especializado en recibir mascotas de migrantes deportados o víctimas de violencia.

    “Cuando las personas enfrentan estos momentos tan difíciles, lo último de lo que deberían preocuparse es de sus mascotas”, expresó la cofundadora Isabel Gullö.

    En Dallas, el refugio Saving Hope Rescue compartió el caso de un hombre en proceso de deportación que debía entregar sus perros con la preocupación de qué ocurriría con ellos.

    Ante esta emergencia, Blain pidió apoyo ciudadano:
    “Necesitamos voluntarios, donaciones de comida, arena, ventiladores y techos para proteger a los animales. Hemos superado la capacidad de lo que podemos recibir”, enfatizó.

  • Mount Pleasant, el corazón de la comunidad salvadoreña en Washington, "paralizado" por el miedo a las redadas

    Mount Pleasant, el corazón de la comunidad salvadoreña en Washington, «paralizado» por el miedo a las redadas

    Las calles de Mount Pleasant, un barrio latino al noreste de Washington D.C., permanecen casi vacías desde que el presidente Donald Trump ordenó el despliegue de la Guardia Nacional en la capital, lo que ha generado temor entre cientos de salvadoreños que residen en la zona.

    El operativo de seguridad, enmarcado bajo la declaración de “Emergencia de Seguridad Pública” en la ciudad, ha provocado que negocios bajen sus ventas, trabajadores dejen sus empleos por miedo a ser detenidos, y residentes eviten salir incluso para comprar alimentos.

    Una lona colgada en la plaza principal resume el sentir del vecindario: “No a las deportaciones en Mount Pleasant. No a la Migra”, se lee en español. La comunidad denuncia que los operativos están enfocados únicamente contra los hispanos.

    “Esto es solo contra nosotros. No se ve a los etíopes, a los chinos o a otros con miedo. Vienen a por los hispanos”, relató a EFE una salvadoreña que trabaja en un restaurante local desde hace dos décadas, y que ahora teme incluso manejar su vehículo por miedo a ser detenida por agentes de inmigración, a pesar de contar con permiso de trabajo y residencia.

    Fotografía que muestra carteles en contra de la redadas en En el barrio de Mount Pleasant, uno de los enclaves latinos de Washington. EFE

    Trump militariza Washington y aumenta arrestos

    La semana pasada, el presidente Trump ordenó el despliegue de la Guardia Nacional, tomó el control de la policía local y reforzó la presencia de agentes del FBI, la DEA y el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), bajo el argumento de combatir la criminalidad.

    Según la fiscal general Pam Bondi, estos operativos ya han derivado en 630 arrestos, aunque organizaciones defensoras de derechos humanos denuncian que muchos de ellos corresponden a inmigrantes indocumentados.

    “La gente tiene mucho miedo. La presión psicológica es enorme porque ves los operativos en la calle y luego en redes sociales”, explicó un salvadoreño sentado solo en la barra de un restaurante, quien también pidió anonimato.

    Negocios latinos, paralizados

    El impacto también ha sido económico. Comercios latinos en Mount Pleasant, muchos de ellos dirigidos por salvadoreños, han reportado una drástica caída en el número de clientes. El miedo ha vaciado las terrazas y reducido los pedidos, incluso a domicilio, ya que muchos repartidores —principalmente latinoamericanos— han optado por dejar de trabajar.

    “No tenemos clientes, las empresas proveedoras nos preguntan por qué no hacemos pedidos”, relató el gerente de un restaurante especializado en pollo. Indicó que incluso uno de sus empleados fue detenido por agentes de inmigración, enterándose del hecho por un video que circuló en redes sociales.

    “Hemos tenido que reducir turnos porque no hay trabajo”, lamentó.

    En medio del temor generalizado, muchos habitantes han optado por permanecer en casa, limitar sus salidas al trabajo y evitar cualquier espacio público. Otros se han visto forzados a comprar en línea para no exponerse a los controles.

    El barrio de Mount Pleasant es el corazón de la comunidad salvadoreña en Washington. EFE

    Extensión del operativo, una posibilidad latente

    La comunidad espera que la situación termine pronto. “Dijeron que duraría un mes. Le rezo a Dios para que se acabe rápido”, expresó una salvadoreña mayor, mientras regresaba de hacer sus compras.

    Sin embargo, el presidente Trump ha advertido que podría extender el operativo, argumentando que la medida aún no ha sido suficiente. Para ello, necesitará la aprobación del Congreso, donde mantiene mayoría.

    Mientras tanto, cientos de inmigrantes en Mount Pleasant —y especialmente la comunidad salvadoreña— continúan enfrentando un ambiente hostil, marcado por el temor, la parálisis social y la incertidumbre de lo que vendrá.

  • EEUU anuncia la revisión de visas vigentes de 55 millones de extranjeros

    EEUU anuncia la revisión de visas vigentes de 55 millones de extranjeros

    La Administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este jueves que mantiene en marcha un proceso de verificación sobre más de 55 millones de personas con visas estadounidenses válidas, como parte de su política migratoria más restrictiva desde su retorno al poder en enero de este año.

    Un funcionario del Departamento de Estado detalló que esta «verificación continua» busca identificar cualquier posible infracción migratoria que pueda llevar a la anulación del visado y eventual deportación de EE. UU., sin especificar un plazo concreto para finalizar este proceso.

    «El Departamento de Estado revoca las visas siempre que existan indicios de una posible inelegibilidad, como por ejemplo, indicadores de permanencia vencida, actividad delictiva, amenazas a la seguridad pública, participación en cualquier tipo de actividad terrorista o apoyo a una organización terrorista», agregó el portavoz.

    El funcionario también indicó que como parte del procedimiento se examina toda la información disponible, incluidos registros policiales, antecedentes migratorios y otros documentos que puedan haber surgido después de la emisión de la visa.

    Dentro de esta estrategia, el Departamento de Estado ha incrementado significativamente las revocaciones de visados desde el regreso del presidente Trump.

    “Desde enero pasado se ha revocado más del doble de visas que en el mismo periodo de 2023, incluyendo casi cuatro veces más visas de estudiante”, afirmó el funcionario.

    Una de las medidas más polémicas fue la cancelación de visas a estudiantes extranjeros que participaron en protestas propalestinas contra la ofensiva de Israel en Gaza, en el contexto del conflicto en Medio Oriente.

    Además, el sábado pasado, el gobierno estadounidense suspendió la emisión de visas de visitante a personas provenientes de Gaza, mientras se realiza una revisión exhaustiva sobre los recientes permisos de entrada humanitaria otorgados desde esa región palestina.

     

  • Trump tardaría 50 años en deportar a 15 millones, advierte estudio

    Trump tardaría 50 años en deportar a 15 millones, advierte estudio

    La promesa del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de deportar a 15 millones de migrantes tomará alrededor de 50 años si se mantiene el ritmo actual de expulsiones, según estimó este miércoles Luciana Gandini, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

    Durante el foro ‘Migración: desplazamiento forzado, diásporas y apoyo universitario’, la socióloga indicó que las deportaciones no han crecido significativamente respecto a años anteriores, y que las cifras actuales distan mucho de las metas anunciadas por el mandatario estadounidense. “No se han cumplido las promesas de expulsar entre 15 y 20 millones. Hasta ahora se han deportado unas 150,000 personas”, puntualizó Gandini.

    Además, advirtió que el discurso antiinmigrante del presidente Trump comienza a generar ecos en otras partes del mundo, reforzando políticas restrictivas fuera del contexto estadounidense.

    La investigadora, quien coordina el Seminario Universitario de Desplazamiento Interno, Migración, Exilio y Repatriación de la UNAM, reveló que entre 2010 y 2024, América Latina y el Caribe pasó de tener 8 millones a casi 18 millones de migrantes internacionales, y que el 85 % de estos flujos migratorios ocurren dentro de la región, lo cual representa un fenómeno novedoso.

    También destacó casos crecientes de autodeportaciones, producto del temor, amenazas y la frustración, especialmente entre quienes no logran regularizar su situación migratoria. “El regreso forzado, aunque costoso, se está volviendo una opción para muchos”, explicó.

    Solicitudes de asilo y muertes en rutas migratorias aumentan

    Martha Judith Sánchez, otra de las investigadoras del foro, expuso que la movilidad internacional sigue en aumento, con 304 millones de migrantes en el mundo, lo que representa el 3.6 % de la población global.

    Las solicitudes de asilo crecieron un 30 % entre 2020 y 2022, pasando de 4.1 millones a 5.4 millones, mientras que la cantidad de refugiados aumentó de 14 millones en 2000 a 35.2 millones en 2014. A esto se suman los 8,938 migrantes que han muerto en rutas peligrosas de desplazamiento hasta 2024.

    Por su parte, el investigador Mario Luis Fuentes Alcalá señaló que el 40 % de los desplazamientos forzados en América Latina involucran a comunidades indígenas, muchas de ellas afectadas por conflictos territoriales, violencia o marginación estructural.

    En México, para finales de 2024 se estiman 390,000 personas desplazadas internamente, indicó Fuentes, quien también coordina el proyecto La UNAM en las fronteras. Llamó a evitar estigmatizar los lugares de origen, ya que “están surgiendo nuevas formas de comunidad, relaciones sociales y configuraciones territoriales”.

    “El territorio es una construcción social, cultural y política. Son espacios ocupados por otros, y la llegada de nuevas poblaciones genera tensiones y competencia por los mismos recursos”, explicó.

    La UNAM ofrece orientación, contención y asistencia a migrantes a través de su plataforma “UNAM, Acción Migrante”, que brinda acompañamiento tanto a mexicanos como a personas de otras nacionalidades.

  • César, un salvadoreño deportado por Trump que trata de rehacer su vida en una isla española

    César, un salvadoreño deportado por Trump que trata de rehacer su vida en una isla española

     El salvadoreño César Méndez salió más tarde ese día de su casa para ir a trabajar; cuando fue a subirse al coche lo pararon, lo pusieron contra la pared y lo esposaron. Había caído en una redada antimigratoria que le condenaba a dejar Estados Unidos tras 20 años residiendo en el país.

    César lleva apenas un mes en la isla española de Fuerteventura (en las Islas Canarias), donde ha optado por poner el marcador a cero y empezar una nueva vida, igual que hizo cuando en 2005 decidió abandonar El Salvador y probar suerte en Estados Unidos.

    En Cuscatlán, El Salvador, se ganaba el jornal en una fábrica de textiles. Con el salario iba alimentando la nevera hasta que empezaron las amenazas de las pandillas.

    “Era un acoso diario, cuando salía a trabajar estaban fuera; me pedían dinero y si no me golpeaban y maltrataban”, cuenta en una entrevista con EFE. Al final, no le quedó más remedio que salir del país hacia Estados Unidos huyendo de la violencia de las pandillas y dejando atrás una hija.

    Hizo el viaje por la ruta terrestre que une México con Estados Unidos. Estuvo mes y medio en el trayecto a través de un camino lleno de peligros, “en el que hay malos tratos, hambre, sed”, cuenta.

    Parte del viaje fue como polizón a lomos de ‘La Bestia’, el tren de mercancías que atraviesa México, convertido en transporte por excelencia para los centroamericanos indocumentados y cuyas ruedas de acero han dejado un reguero de mutilados y muertos.

    “Fue difícil porque el tren iba a mucha velocidad, tuvimos que subirnos corriendo. Durante la noche cayó una tormenta muy fuerte, nos mojamos todo el trayecto hasta llegar a Tamaulipas, fueron tres días aguantando frío, hambre y lluvia”, recuerda.

    Un ‘coyote’, los traficantes de personas que actúan en el corredor migratorio de México, le ayudó a cruzar la frontera con Estados Unidos. En California se buscó la vida como ‘freganchín’ en restaurantes, lavando coches, en la construcción…

    En 2011 se mudó a Nueva Jersey y pudo levantar una pequeña empresa de construcción con la que, poco a poco, comenzó a acariciar el sueño americano.

    En todo ese tiempo, no logró regularizar su situación, “lo intenté muchas veces pagando a abogados, nos daban esperanzas, pero nunca se hizo nada. Me iban a dar un permiso de trabajo, pero llegó Trump y ahí quedó”, lamenta.

    El sábado 12 de abril salió de su casa para ir al trabajo, cuando fue a subirse al coche, vio cómo unos hombres se bajaban de unos vehículos y caminaban hacia él. “Aparecieron unos de la parte de atrás de mi carro y otros de frente; salieron carros por todos lados, eran oficiales de inmigración”, cuenta.

    “Me agarraron y empujaron contra otro carro, me esposaron y me dijeron que no podía hacer nada, luego me llevaron a un lugar de detención a tomarme las huellas” y por la noche, a eso de las ocho, a una celda.

    Pensó que su expulsión del país sería en horas, pero le tenían preparado un peregrinaje por centros de retención durante cinco semanas.

    Dos semanas en Nueva Jersey, luego al centro de retención de Luisiana, después al de Texas y, de nuevo, Luisiana. “Se sufre mucho”, dice mientras recuerda los despertares a las dos de la madrugada, cómo los esposaban de manos y pies para moverlos de un centro a otro, lugares donde “los derechos se pierden, hay mucha discriminación”, confiesa.

    El día que lo expulsaron a El Salvador, lo despertaron muy temprano, lo esposaron y lo mandaron para el avión, ya en el aire pensaba lo que había dejado atrás: su esposa, familia, amigos, su coche, a los dos empleados de su empresa… “en Estados Unidos tenía la vida hecha”, dice.

    En El Salvador lo recibieron los de inmigración, “llegué cansado, desorientado y sin saber qué pensar ni hacer; me sentí como un delincuente porque así es como nos tratan, aunque no haya hecho nada porque siempre he intentado hacer las cosas bien”, comenta.

    Tras unas semanas en su país, pudo reunirse con su esposa, que había dejado Estados Unidos de forma voluntaria para reencontrarse con César.

    La mujer, con nacionalidad española, había vivido en Fuerteventura y pensaron que la isla canaria sería un buen lugar para desconectar. Al final, decidieron empezar una nueva vida en la isla. Con el marcador de nuevo a cero, César intenta regularizar su situación a través del arraigo familiar, al tener su mujer nacionalidad española.

    “Siempre he trabajado, eso es lo que busco y lo que busqué en Estados Unidos, pero no tuve la oportunidad de regularizarme”.

  • Trump reconoce dificultad de reemplazar a migrantes expulsados en sectores clave

    Trump reconoce dificultad de reemplazar a migrantes expulsados en sectores clave

    El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció este martes que los trabajadores migrantes expulsados bajo su política migratoria son difíciles de reemplazar, especialmente en áreas sensibles como la agricultura, donde su ausencia impacta directamente la economía nacional.

    No se pueden sustituir fácilmente”, afirmó el mandatario en una entrevista con CNBC, destacando que los ciudadanos estadounidenses que viven en zonas urbanas “no hacen ese trabajo”, pese a múltiples intentos. Según Trump, los migrantes “lo hacen de forma natural”, en referencia al tipo de trabajo que desempeñan en el campo.

    El presidente abordó el tema tras ser consultado sobre el impacto económico de las deportaciones, reflejado en el más reciente informe de empleo, el cual reportó una pérdida de 1.7 millones de puestos ocupados por trabajadores extranjeros entre marzo y julio, y solo 73,000 nuevos empleos netos creados, cifra que Trump consideró “insuficiente”.

    Aunque reiteró que su administración continúa con la expulsión de personas con antecedentes criminales, el presidente subrayó que está “trabajando con los agricultores para no afectar su labor”, asegurando que “son una parte muy importante de este país y no vamos a hacer nada que los perjudique”.

    Trump también dejó entrever la posibilidad de que algunos de estos trabajadores retornen legalmente a Estados Unidos. “Quiero trabajar con ellos. En algunos casos, los enviamos de regreso con un permiso para que puedan volver legalmente”, explicó. Añadió que su administración está elaborando “reglas y regulaciones” para gestionar este proceso de forma segura y eficiente.

    Esta no es la primera vez que el presidente Trump admite el impacto de su estrategia migratoria en sectores productivos clave. En junio ya había adelantado que se evaluarían medidas para mitigar los efectos en la agricultura, la hotelería y el ocio, áreas donde los trabajadores migrantes desempeñan un rol crucial.

  • Solo en marzo 764 salvadoreños fueron deportados según Migración

    Solo en marzo 764 salvadoreños fueron deportados según Migración

    Al menos 764 salvadoreños fueron deportados solo durante marzo de 2025, según el reporte de avance del Plan Anual Operativo de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) publicado en el sitio de transparencia de la institución.

    El informe señala que la Gerencia de Atención al Migrante de la DGME recibió y brindó asistencia a 764 retornados vía aérea y terrestre solo durante el mes de marzo. La institución no ha divulgado la cantidad de deportados recibidos en enero, febrero, abril, mayo y junio.

    Migración señala que la recepción de deportados «depende de factores externos a la institución». Según datos recopilados por la organización Wirness at the Border, El Salvador ha recibido al menos 85 vuelos con deportados en los primeros seis meses de 2025.

    A inicios de 2025, la entidad migratoria reportó que en todo el año pasado habían recibido a 14,989 salvadoreños deportados, de ellos, 14,189 desde Estados Unidos; otros 698 desde México y apenas 99 desde otros países.

    Esta cifra significó un aumento del 12 % frente a los 13,358 deportados a El Salvador durante 2023. El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) documentó 15,284 salvadoreños deportados el año pasado. La mayoría de los deportados regresan a El Salvador vía aérea.

    Los expertos migratorios César Ríos de Agenda Migrante y Celia Medrano han urgido al gobierno salvadoreño la implementación de un plan integral para atender a los salvadoreños que están siendo deportados desde Estados Unidos.

    Esta semana, el Ministerio de Relaciones Exteriores anunció el lanzamiento de un nuevo programa de atención para deportados, con un financiamiento de $3.4 millones y con una duración de 24 meses.

    Con el programa buscan: fortalecer la capacidad institucional para brindar asistencia diferenciada y humanitaria; implementar estrategias de comunicación y sensibilización sobre derechos humanos y migración irregular y fortalecer los mecanismos de reintegración económica a través de empleo, formación, certificación profesional y fomento de emprendimientos.

  • Ecuador deporta a 1,000 presos colombianos y Colombia exige protocolo

    Ecuador deporta a 1,000 presos colombianos y Colombia exige protocolo

    El gobierno de Ecuador confirmó la deportación de 1,000 presos colombianos como parte de un proceso para reforzar la seguridad interna y descongestionar su sistema penitenciario. Según las autoridades ecuatorianas, 700 personas privadas de libertad ya han sido repatriadas a Colombia a través del Puente Internacional de Rumichaca, en medio de estrictos protocolos de seguridad.

    El Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI) explicó que la medida se ejecuta en el marco de la Ley Orgánica de Movilidad Humana y su reforma por la Ley de Integridad Pública, además del artículo 61.1 del Código Penal ecuatoriano. El proceso se inició oficialmente el 2 de julio con un acuerdo entre la Subsecretaría de Migración y la Dirección de Control Migratorio.

    Durante julio, se realizaron alrededor de 1,000 audiencias individuales con internos colombianos, cuyas resoluciones fueron enviadas a los jueces competentes. Estos emitieron boletas de excarcelación en un plazo máximo de 24 horas. Una vez liberados, los repatriados fueron deportados a través del paso fronterizo con Colombia.

    El Ejecutivo de Ecuador afirmó que el proceso ha sido ejecutado bajo «estrictos protocolos de seguridad» y en «irrestricto respeto a los derechos humanos», protegiendo la privacidad y garantizando los derechos fundamentales de los repatriados.

    Colombia denuncia falta de coordinación

    Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia manifestó su inconformidad por la falta de aviso previo sobre la deportación masiva, señalando que el proceso fue improvisado y sin protocolo definido. Hasta ahora, 603 colombianos han sido recibidos por las autoridades del país: 543 hombres y 60 mujeres, según cifras oficiales.

    La canciller Rosa Yolanda Villavicencio criticó la ausencia de coordinación bilateral, aunque destacó la respuesta institucional frente a la situación: “Las personas han sido atendidas con dignidad y empatía. Recibieron orientación sobre sus derechos y deberes como retornados”.

    Colombia insistió en la necesidad de establecer un protocolo binacional con calendario definido, para evitar situaciones imprevistas que puedan vulnerar los derechos de los ciudadanos repatriados y afectar la estabilidad fronteriza.

  • EEUU inicia deportaciones desde centro migratorio “Alligator Alcatraz” en Florida

    EEUU inicia deportaciones desde centro migratorio “Alligator Alcatraz” en Florida

    El Gobierno de Estados Unidos comenzó esta semana los vuelos de deportación de migrantes detenidos en el nuevo centro de detención “Alligator Alcatraz”, una instalación migratoria ubicada en una vieja pista aérea en medio de los Everglades, al oeste de Miami, según confirmó el gobernador de Florida, Ron DeSantis.

    “Me complace reportar que esos vuelos desde ‘Alligator Alcatraz’, de parte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), ya han comenzado. El ritmo está incrementando. Hemos removido a cientos de ilegales desde aquí”, declaró DeSantis durante una conferencia de prensa realizada en el mismo centro.

    El gobernador republicano adelantó que la Guardia Nacional de Florida pronto participará en el proceso actuando como jueces migratorios para acelerar las deportaciones, una medida que fue autorizada por el presidente Donald Trump durante su visita al centro el pasado 3 de julio.

    “El propósito completo es facilitar más vuelos y deportaciones desde este sitio. La pista aérea permite operaciones diurnas y nocturnas, lo que lo convierte en un punto clave para la política migratoria”, afirmó DeSantis.

    El centro de detención Alligator Alcatraz, inaugurado el 3 de julio en un aeropuerto abandonado, actualmente tiene capacidad para 2,000 migrantes, pero se proyecta que alcance hasta 4,000 detenidos, según explicó Kevin Guthrie, director ejecutivo de la División de Manejo de Emergencias de Florida (FDEM).

    Aunque no se especificaron las nacionalidades de los deportados, DeSantis recordó que la Administración Trumpordenó la expulsión de cerca de 800,000 personas, con entre 50,000 y 75,000 radicadas en Florida.

    Protestas y denuncias por condiciones “inhumanas”

    La operación ha generado críticas. Activistas y familiares de migrantes han denunciado las condiciones del centro como “inhumanas” y lo comparan con un “campo de concentración” y una “jaula para perros”. Reportes indican que al menos 1,000 personas han sido detenidas en el lugar, seis de ellas hospitalizadas desde su apertura.

    La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, exigió este viernes mediante una carta a FDEM el acceso al sitio para inspecciones y supervisión ante los reportes de violaciones a los derechos humanos.

    Pese a las críticas, DeSantis defendió el rol de Florida como líder en la implementación de la política migratoria de Trump, destacando que han evitado la llegada de más de 18,000 migrantes a las costas del estado, y que han firmado acuerdos con todos los condados para cooperar con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).