El diputado Francisco Lira, de Alianza Republicana Nacionalista (Arena), cuestionó la reforma dictaminada el lunes para suprimir la participación de las juntas de vigilancia de las profesiones médicas en el proceso de autorización de establecimientos de salud privados en El Salvador.
La reforma fue aprobada mediante dos dictámenes favorables de la Comisión de Salud, Agricultura y Medio Ambiente. Será aprobada en una próxima sesión plenaria de la Asamblea Legislativa, la más cercana está programada para este miércoles.
El presidente del Consejo Superior de Salud Pública (CSSP), Daniel Quinteros, explicó que las juntas de vigilancia se reúnen cuatro veces al mes, por lo que el trámite de autorización, traslado o modificación de un centro privado de salud se prolonga hasta un mes. El diputado Juan Rodríguez (Nuevas Ideas) dijo que los trámites incluso se prolongan tres meses. Con la reforma, ofrecen reducir el trámite de autorización de hospitales o clínicas privadas en cinco días.

El presidente del CSSP destacó que muchos profesionales de la salud hacen sus inversiones y están esperando las autorizaciones de sus establecimientos. «El médico, la enfermera, el laboratorista clínico está invirtiendo dinero en un establecimiento, ha hecho préstamos para poder comprar el equipo, al pasar esos 30 días, hace que su primer mes es pérdida, a veces su segundo mes es pérdida también», argumentó. «La idea es reducirla a cinco días», indicó.
El funcionario explicó que el CSSP busca siempre cumplir con la garantía de inspección que ofrecen actualmente las juntas de vigilancia.
«Concentrar el poder»
El diputado Francisco Lira, de Arena, cuestionó la eliminación y reclamó «más respeto» ante risas de diputados de Nuevas Ideas. Al respecto el diputado Saúl Mancía, de Nuevas Ideas, dijo que iba a dar «su aporte lo más serio posible» y felicitó al CSSP.
Lira aseguró que durante el gobierno actual «eliminan la contraparte de la sociedad civil» y que el tema no es que el médico privado no tenga tiempo para estar en las reuniones de juntas de la profesión, sino que haya una participación «tripartita» como lo dice la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
«Cuando están eliminando un rol histórico de las juntas de vigilancia y concentrar todas las atribuciones en el Consejo, obviamente reduciendo los contrapesos técnicos y gremiales. ¿Acaso el objetivo mayor será concentrar el poder político en el Consejo y no generar una incidencia de independencia administrativa y de calidad?», le preguntó Lira al presidente del CSSP.
La salud no puede ser un instrumento de control del poder. Por eso hoy en la Comisión de Salud debemos preguntarnos si estas reformas están realmente orientadas a mejorar la atención a los salvadoreños o si buscan concentrar decisiones en manos del Ejecutivo.
Francisco Lira, diputado de Arena.
El presidente del CSSP respondió que ahora los inspectores de las juntas de vigilancia trabajarán directamente con el CSSP, solo que «no esperarán toda esa tramitología»; y que «no hay una concentración de poder per sé» ya que el CSSP y las juntas de vigilancia «son de elección gremial».
«No hay una concentración de poder per sé (en sí mismo)… Todos ellos son grandes profesionales y son independientes en sus argumentaciones y resoluciones… (Los inspectores de las juntas de vigilancia) siguen siendo trabajadores del Consejo y están con nosotros de manera más directa».
Daniel Quinteros, presidente del CSSP.
Quinteros aseguró que la reforma busca que «las compañías y las personas naturales cumplan las reglas» y prometió más transparencia.
«Nosotros vamos a ejercer un control que sea más transparente del trabajo que ellos (inspectores de las juntas de vigilancia) hacen, verificar que ellos estén sujetos a las reglas, que se acompañen conforme al instrumento disponible tanto para el usuario como para el profesional, de manera que no haya una discrecionalidad en cuanto al instrumento que se pasa a la hora de hacer la inspección», prometió.
La reforma al Código de Salud y a la Ley del CSSP y juntas de vigilancia eliminará el requisito de tener un «informe favorable de la junta de vigilancia» correspondiente para que el CSSP autorice un establecimiento de salud privado, con el objetivo de reducir el plazo de resolución de 30 a 5 días hábiles.
Con la reforma, también el CSSP tendría la facultad de regular los otros servicios privados de salud que, según el presidente de CSSP, se refieren a servicios de ambulancia, enfermería, médicos o de cuidados de adultos mayores ofrecidos a domicilio a la población por personas o empresas.
