A pocas horas de reunirse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Florida, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, dejó claras las «líneas rojas» del país en las negociaciones de paz, en medio de la invasión rusa que supera los mil días de conflicto.
“Debemos trabajar para minimizar los asuntos pendientes. Por supuesto, hoy existen líneas rojas para Ucrania y el pueblo ucraniano”, expresó el mandatario, quien advirtió que los puntos más delicados del borrador del plan de paz incluyen la soberanía territorial y el control de la planta nuclear de Zaporiyia.
Zelenski sostuvo que cualquier posible actualización del plan de paz será comunicada a los ciudadanos antes de su aprobación, ya sea mediante referéndum o cambios legislativos.
“Es el pueblo ucraniano quien tiene la última palabra”, recalcó a través de su cuenta oficial en la red social X.
Mientras viajaba hacia Estados Unidos, el mandatario denunció que Rusia lanzó ataques masivos sobre distintas zonas de Ucrania. Según él, estos bombardeos representan la “respuesta” del Kremlin a los esfuerzos internacionales por alcanzar un alto al fuego. “Nuestra petición más importante es que las garantías de seguridad sean sólidas”, dijo.
Zelenski advirtió que no es viable celebrar elecciones bajo las actuales condiciones de inseguridad, presionadas también por exigencias de Washington.
“Los cielos deben ser seguros y la seguridad debe estar garantizada en todo nuestro territorio, al menos durante las elecciones o un referéndum”, manifestó. Además, pidió que se permita el ingreso de observadores internacionales incluso en zonas ocupadas por Rusia.
Apoyo europeo antes del encuentro clave
Horas antes del encuentro con el presidente Trump, Zelenski sostuvo una llamada telefónica con varios líderes europeos. Participaron la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el presidente del Consejo Europeo, António Costa; el secretario general de la OTAN, Mark Rutte; y el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
Durante la conversación, los mandatarios revisaron los “elementos más fundamentales de los borradores de los documentos clave” que se discutirán en Florida. Zelenski afirmó que se necesita una “postura firme en el frente y en la diplomacia para evitar que (Vladimir) Putin manipule y eluda un fin real y justo de la guerra”.
Von der Leyen aseguró que “todos los esfuerzos deben conducir al objetivo común: una paz justa y duradera que preserve la soberanía y la integridad territorial de Ucrania”, y subrayó que la Comisión Europea mantendrá la presión sobre Rusia en 2026.
António Costa, por su parte, reiteró que el apoyo de Bruselas “no flaqueará” y respaldó una “Ucrania fuerte y próspera en la UE” como garantía de seguridad para todo el continente. También aplaudió las recientes sanciones contra Rusia, incluyendo el bloqueo prolongado de activos soberanos.
